Por Bruno Gaete

@PortalPortuario

El presidente de la Asociación Gremial de Armadores de Transporte Marítimo, Fluvial, Lacustre y Turístico Sur Austral de Chile (Armasur), Héctor Henríquez, cuestionó el posible ingreso de navieras chilenas constituidas con capital extranjero a la reserva naval. Una situación que sería realizable de aprobarse el actual proyecto de Ley de Cabotaje que se está revisando en comisiones del Senado.

Cabe recordar que la instancia legislativa busca modificar la Ley de Fomento a la Marina Mercante y la Ley de Navegación y, con esto, incentivar la competencia en el mercado de cabotaje marítimo mediante su flexibilización. El proyecto fue aprobado en la comisión de Transportes y Telecomunicaciones del Senado y deberá ser tratado en dos ocasiones más.

Al respecto, Henríquez comentó a PortalPortuario que “hay cosas que nos preocupan más y otras menos. Yo creo que de las cosas que nos preocupan es la reputación de nave en esta nueva definición, la que quedó peor de lo que se tenía y eso para todo el mundo, no solamente para el sector de armadores, sino que también para el laboral. Segundo, creemos que el tema del cabotaje es la ruta de salida, si no se le ponen ciertas restricciones y se hace como en Nueva Zelanda exclusivamente para carga incidental, creemos que puede tener algún efecto”.

“Lo otro que nos preocupa a nosotros especialmente -creemos que es un problema que puede estar más ajeno en la zona centro- es el tema de la propiedad, el capital mayoritario. El concepto de soberanía como integración territorial es un concepto fuerte y en eso creemos que no da lo mismo quien es el propietario de accionista mayoritario que esté haciendo ese servicio, aunque sea con nave bandera chilena. Si el propietario controlador no es chileno, puede ser un controlador argentino, boliviano, peruano por caricaturizar un poco esto, creemos que no es prudente y menos con la coyuntura que nos encontramos con países vecinos”, complementó.

En el marco del debate llevado a cabo en las sesiones de la comisión de Transportes se descartó la idea de flexibilizar el cabotaje desde la zona centro al norte del país, excluyendo la aplicación de la misma desde el paralelo 41 al sur austral.

En este sentido, Henríquez manifestó estar a favor de la idea. “Nosotros pensamos que si, probablemente no es compartido por muchos, pero pensamos como lo hace Perú. Perú diferencia, abre la posibilidad de que se haga cabotaje con buque extranjero, pero exclusivamente para contenedores y no le da a la conectividad posibilidad de que sea con buque extranjero, no le da esa posibilidad, no da otro tipo de posibilidades”.

“Uno no puede ser más papista que el Papa y efectivamente reconocer que en zonas donde no hay cabotaje, que es mucho de la zona centro y del norte, uno no podría decir que no se aplique, pero en el sur, donde tenemos más de 300 naves y donde se ha desarrollado un cabotaje intensivo, cualquier kilo de carga que le saques a la cadena afecta a los servicios de conectividad, de Salmonicultura y afecta las naves y afecta a los trabajadores, afecta a todas la gente”, agregó.

En este punto, el ministros de Transportes sostuvo en abril del presente año que el proyecto de Ley no colocaría en riego la reserva naval, ya que ampliaría y fortalecería la misma al existir más naves de bandera chilena. “Al permitir que se constituyan nuevas navieras chilenas con capitales extranjeros, el número de naves nacionales aumentará, fortaleciendo la reserva naval, ya que en caso de conflicto existirá mayor disponibilidad de naves y dotación”, remarcó.

Henríquez al ser consultado respecto a lo sostenido por Juan Carlos Paz, presidente de la Autoridad Portuaria Nacional del Perú, sobre que Chile y otros vecinos pueden “ser socios del Perú” si se consolida, por ejemplo, la idea de “cabotaje regional”, acotó que “yo creo que se está dando, porque al final lo que se está permitiendo es que naves extranjeras hagan cabotaje en Chile y el Puerto de Chancay va a ser una un concentrador de carga, acumulador de carga y va a generar distintos feeders. Si eso trae algunas beneficios para zonas de Chile donde no hay cabotaje, bueno, bienvenido sea, pero en zonas donde hay cabotaje creemos que se produce ahí la distorsión de la competencia”, acotó el titular de Armasur.

Ley 40 horas

Con la entrada en vigencia de la Ley 40 Horas, Henríquez sostuvo que los efectos que esta medida tendrá dependerán de la actividad que realicen los sectores que integran Armasur. “Si hablamos de las naves, así como quedó el proyecto yo diría que no tiene grandes efectos. Tiene más costos evidentemente, porque al final no te reducen la jornada, pero la hora 44-45 tienes que pagarla como extraordinaria”.

“Es más costo, es verdad, pero no mata la industria, puede seguir funcionando, pero para los astilleros y para los puertos es más complejo, porque trabajan con turno y las 40 horas les exige una mayor eficiencia, menor rotación y una serie de cosas que tienen impacto impacto en los costes”, añadió.