Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters
El ex propietario griego de un carguero, confiscado por España en 2023 por transportar más de cuatro toneladas de cocaína junto con granos de café desde América Latina a Europa, niega cualquier vínculo con las drogas, según dio cuenta su abogado.
En enero de 2023, las autoridades españolas interceptaron el buque Blume, entonces operado por Grecia y con bandera de Togo, frente a las Islas Canarias. En su interior encontraron cocaína con un valor aproximado de 200 millones de dólares.
Lo anterior derivó en la detención de la tripulación y en la movilización del Blume, que había salido de Brasil con destino a Rusia, a la isla de Tenerife.
De manera reciente, Grecia detuvo esta semana a su antiguo propietario, de 68 años, a su hijo, de 24, y a una mujer. El viernes 18 de julio, los sospechosos comparecieron ante la fiscalía para responder a cargos que incluyen dirigir una organización internacional de narcotráfico -al menos- desde 2021.
“La investigación principal y un posible juicio confirmarán la inocencia de mis clientes”, indicó su abogado Sakis Kehagioglou, añadiendo que la tripulación ha sido condenada por el caso.
Las autoridades griegas no han revelado los nombres de los detenidos. Un cuarto sospechoso sigue prófugo y se presume que se encuentra en Turquía, según documentos judiciales a los que tuvo acceso Reuters.
Blume fue monitoreado mucho antes de ser interceptado, según los documentos. La policía británica recibió un aviso sobre la operación de narcotráfico en septiembre de 2022. Tras examinar los antecedentes del Blume, la policía española concluyó que cumplía con el perfil de los buques que realizan trasiegos de drogas entre barcos.
Las autoridades de Tenerife lo registraron el 18 de enero de 2023, confiscando 153 bolsas de cocaína en el camarote de un tripulante y en un trastero.
La investigación griega determinó que el navío fue adquirido en 2022 por Rentoor Chartering y operado por Dignatio Corp, ambas empresas con sede en las Islas Marshall fundadas por el sospechoso de 68 años, expolicía con antecedentes penales, según los documentos. La nave, renombrada, fue vendida a una empresa turca en mayo.
