Por Redacción PortalPortuario
@PortalPortuario
El Puente de la Bioceánica, obra clave de la ruta PY15 que conecta Paraguay con Brasil, está cada vez más cerca de convertirse en una realidad tangible. Según el Ministerio de Obras Públicas paraguayo solo falta un tramo central de 149,60 metros para que ambos lados del río Paraguay queden completamente unidos. Los trabajos ya llevan 78% de avance.
Desde el Consorcio Binacional Pybra informaron que se prevé el hormigonado de las dovelas D11’ y D11 del Pilono 13, piezas que se van uniendo para extender el tablero sobre el río. Para este año, en el Pilono 13 se ha construido hasta la dovela 11 y en el Pilono 14 hasta la dovela 13.
Al mismo tiempo, en el Pilono 14 continúa el montaje de los tirantes, que sostienen cada segmento y permiten que la estructura avance de manera segura hacia el centro del cauce.
También se completó el postensado de los mástiles, seguido de la inyección de las vainas que protegen los cables internos y aseguran la durabilidad del puente. Estos procesos, aunque técnicos, son fundamentales para garantizar que la obra pueda servir a varias generaciones y sostener el tránsito creciente que acompañará el desarrollo de la región.
Del lado brasileño se ejecutan los cordones de seguridad anti-colisión y anti-suicidio, que reforzarán la protección de los futuros usuarios. En paralelo, del lado paraguayo siguen avanzando los preparativos del acceso con la colocación de material granular y la imprimación de los primeros 500 metros, lo que permitirá un ingreso cómodo y seguro al puente una vez que entre en funcionamiento.
Más allá de su estructura principal, la obra incluye calles, accesos y zonas logísticas que beneficiarán especialmente a Carmelo Peralta y a las comunidades productivas del Chaco. La conexión directa con el corredor bioceánico abrirá oportunidades para productores, estudiantes, comerciantes y familias que dependen de rutas más eficientes y accesibles.
El Puente de la Bioceánica tendrá unos 1.300 metros de extensión sobre el río Paraguay, con dos amplios carriles, banquinas que podrían transformarse en carriles adicionales en el futuro y veredas pensadas para peatones y ciclistas. A esto se suman las avenidas de acceso y una costanera que acompañarán el flujo urbano, conformando una infraestructura diseñada para integrar territorios, dinamizar la economía local y conectar al Paraguay con los puertos del Atlántico y del Pacífico.














































