Por Redacción PortalPortuario.cl
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El Puerto de Long Beach, Estados Unidos, ha logrado potencia su capacidad ferroviaria al completar la construcción de un nuevo proyecto que busca aumentar la eficiencia del movimiento de mercancías y reducir la congestión en las carreteras locales, lo anterior al conseguir trasladar más carga en trenes.
En concreto se trata del Proyecto de Acceso de Doble Vía desde el Muelle G al Muelle J, el que logra agregar una segunda línea ferroviaria de aproximadamente 2.4 kilómetros de largo, lo que permite que cuatro terminales en el área de la cuenca sur del Puerto manejen simultáneamente los ferrocarriles que entren y salgan de dicha localidad.
La obra responde a uno de los objetivos fijados en la Actualización de 2017 del Plan de Acción de Aire Limpio de los Puertos de la Bahía de San Pedro, motivo por el cual se cataloga como “una pieza vital del programa” desde la entidad portuaria de Long Beach.
Bajo este contexto, el alcalde de Long Beach, Robert García, señaló que “este proyecto es una pieza importante del programa de mejora del ferrocarril que aumentará la eficiencia y reducirá las emisiones en nuestro puerto. Continuamos invirtiendo en fortalecer nuestra cadena de suministro, priorizando la sostenibilidad ambiental y reduciendo los impactos en las comunidades que rodean el Puerto”.
Por su parte, el Director Ejecutivo del Puerto de Long Beach, Mario Cordero, comentó que “este proyecto agilizará las operaciones y reducirá los viajes de camiones en un momento en que estamos experimentando un crecimiento sin precedentes en la carga. Nuestras inversiones en el ferrocarril en el muelle ayudarán al puerto a seguir siendo globalmente competitivo y ambientalmente sostenible en el futuro”.
En tanto, Sharon L. Weissman, vicepresidenta de la Comisión del puerto de Long Beach, indicó que “aliviar el tráfico de camiones mejorará la calidad del aire y disminuirá el impacto de las operaciones portuarias en la comunidad circundante. Mover mercancías de manera más eficiente y sostenible sigue siendo una de nuestras principales prioridades”.
La construcción del proyecto comenzó en febrero de 2020 y aumentaría la eficiencia ferroviaria en los Muelles G y J en hasta 25%. También minimizaría el conflicto con las operaciones ferroviarias en el muelle de las terminales vecinas y mejoraría la seguridad general en las inmediaciones.
El proyecto de USD 34,7 millones se financió parcialmente con una subvención de USD 14 millones del Programa de Mejora del Corredor Comercial del estado, que fue establecido por el Proyecto de Ley 1 del Senado para pagar las mejoras de infraestructura en las redes de carga designadas por el gobierno federal en todo California, utilizando dinero del estado y del Programa Nacional de Carga por Carretera. El Puerto contribuyó con los fondos restantes para la obra, que se completó antes de tiempo y por debajo del presupuesto.