Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters
El Reino Unido sancionó a las dos mayores compañías petroleras de Rusia, Lukoil y Rosneft, así como a 51 buques cisterna de la llamada “flota en la sombra”, en lo que describió como un nuevo intento por endurecer las sanciones energéticas y cortar los ingresos del Kremlin.
Lukoil y Rosneft fueron designadas bajo las leyes británicas de penalizaciones contra Rusia, debido a lo que Londres calificó como su papel en el apoyo al gobierno ruso.
Las medidas incluyen la congelación de activos, la inhabilitación de directores, restricciones al transporte y la prohibición de servicios fiduciarios británicos.
“Estamos imponiendo sanciones específicas contra las dos mayores compañías petroleras de Rusia, Lukoil y Rosneft”, declaró la ministra de Finanzas del Reino Unido, Rachel Reeves, durante una visita a Estados Unidos.
“Al mismo tiempo, estamos aumentando la presión sobre empresas en terceros países, incluyendo India y China, que continúan facilitando la entrada del petróleo ruso en los mercados globales”, complementó.
La embajada de Rusia en Londres afirmó que las sanciones resultarían contraproducentes al desestabilizar los mercados energéticos globales y aumentar los costos para las empresas y consumidores británicos.
“Contrario a las ruidosas garantías de los líderes británicos, estas restricciones no tendrán ningún impacto en el rumbo de la política exterior rusa”, señaló el comunicado de la embajada.
Por su parte, la ministra de Finanzas británica, Rachel Reeves, declaró que “no hay lugar para Rusia en los mercados globales” y que el Reino Unido tomará todas las medidas necesarias para impedir que Moscú financie su guerra en Ucrania.
Rosneft es el principal productor de petróleo de Rusia, con aproximadamente el 40% de la producción total del país, mientras que Lukoil ocupa el segundo lugar y tiene la mayor exposición internacional entre sus pares nacionales.
Ni Rosneft ni Lukoil respondieron de inmediato a la solicitud de comentarios. Las nuevas sanciones apuntan a 51 embarcaciones, incluyendo 44 pertenecientes a la llamada “flota en la sombra”, así como a individuos y entidades de sectores como energía y defensa.
Las últimas sanciones también incluyen siete buques cisterna de gas natural licuado y la terminal china de GNL Beihai, que ha estado importando cargamentos desde la instalación sancionada Arctic LNG2 de Rusia, según informó el Reino Unido.
Nayara, una refinería de propiedad rusa con sede en Mumbai, India, figura entre las empresas sancionadas. La refinería, cuyo principal accionista es Rosneft y que ya ha sido sancionada por la Unión Europea, está luchando por mantener sus operaciones.
Nayara, que ha condenado las sanciones de la Unión Europea, no respondió de inmediato a la solicitud de comentarios de Reuters.
Las medidas adoptadas por el Reino Unido reducirán la disponibilidad de buques y seguros marítimos para Rusia, ya que algunos volúmenes de petróleo ruso aún estaban siendo transportados y asegurados en sus rutas hacia Asia por empresas con sede en Reino Unido, según indicaron comerciantes familiarizados con las ventas de crudo ruso.
Eso significa que una mayor parte del comercio de petróleo ruso migraría hacia la flota en la sombra, la cual utiliza seguros y servicios no occidentales, según indicaron los comerciantes.
El número de buques en esta flota ya supera los 1.500, según estimaciones de expertos occidentales, por lo que no hay escasez de embarcaciones para transportar petróleo ruso.
Sin embargo, varios puertos de China e India han rechazado en el pasado descargar tanqueros provenientes de la flota en la sombra, lo que complica aún más las ventas de crudo ruso.
Desde la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022, esta flota ha sido cada vez más objeto de sanciones por parte del Reino Unido, Estados Unidos y la Unión Europea.
Se trata de una red de buques cisterna antiguos que, según las autoridades, se utilizan para eludir las sanciones impuestas al petróleo ruso.
