El año pasado representó para el Puerto de Barranquilla uno de los mayores desafíos en cuanto a logística por las dificultades derivadas de los problemas de sedimentación que estuvieron presentes desde mediados de junio, y que imposibilitaron la llegada regular de buques de carga.

No obstante, hoy la realidad es diferente. “La realidad actual es que los niveles del río han bajado de tal manera que las tasas se están acercando a las habituales”, aseguró Pedro Pablo Jurado, director Ejecutivo de Cormagdalena.

Entre el 18 de diciembre de 2021 y el 19 de enero de 2022 se han removido 267.000 metros cúbicos (m3) de sedimento en el sector de Bocas de Ceniza, el más afectado en el canal de acceso al Puerto. Esto, con ayuda de la draga china, Xin Hai Hu 9, que arribó el último mes del año pasado y que se mantendrá en operación en la Costa Atlántica durante este primer semestre, según indicaron las autoridades.

“Hasta ahora, se logró el aumento del calado, que a inicios del año estaba en 6.5 metros (m), luego de cinco días de suspensión de la draga por mantenimiento. El calado actual de 9 metros, lo que refleja mejoría, pero aún faltan varios sectores por atender y mantener. Las condiciones deben estar al menos en 9.8 metros”, precisó Lucas Ariza, director de Asoportuaria.

El Puerto de Barranquilla movilizó en 2021 más de 12.2 millones de toneladas, una cifra superior a la del primer año de pandemia, que también tuvo un buen balance, con más de 10 millones de toneladas. Además, las cifras del año pasado también destacan frente a las de 2019, cuando el puerto alcanzó 11.3 millones de toneladas, según La República.

El director de Asoportuaria advirtió, sin embargo, que pese a los buenos resultados, se perdieron en 2021 cerca de 1 millón de toneladas por aligeramiento. “Debíamos hacer superado 13 millones de toneladas de no ser por la problemática en las condiciones de navegabilidad. El año pasado se perdió un mes de carga”.

La Dirección General Marítima de Colombia (Dimar) informó que “con el seguimiento y análisis permanente de las condiciones océano-atmosféricas en el canal de acceso” y demás factores técnicos, se permitía el ingreso a buques de dimensiones entre 180 metros a 200 metros, con un calado hasta 9 metros, pero operando bajo la luz del día. Explicó que los que tuvieran hasta 180 m de extensión como máximo y un calado hasta 8.5 m, no tendrían restricciones.