A partir del 25 de junio, la naviera danesa Maersk Line comenzará a operar su nuevo y mejorado servicio AC1 que conecta la Costa Oeste de Sudamérica y Asia, considerando recaladas en San Antonio y San Vicente, en Chile. 

La ruta, según informó la naviera en un comunicado, mejorará  el acceso a diversos mercados y permitiendo potenciar el crecimiento de sus clientes.

“Maersk Line está comprometida con la región y esta innovación es reflejo de ello; vamos a aportar con mayor flexibilidad, ampliando nuestra cobertura y mejorando productos de alto interés para quienes a diario confían en nosotros”, señaló Francisco Ulloa, director de Maersk Line para la Costa Oeste de Sudamérica.

La compañía rediseñó su red de servicios desde Asia y lanzará el servicio AC1 -complementando los existentes AC2 y AC3- al mismo tiempo que mantendrá la misma capacidad de carga en esta ruta.

Esta innovación permitirá a Maersk Line entregar un servicio pionero en la industria al incorporar un tiempo de tránsito de 27 días desde Chiwan, el menor del mercado, y el único servicio directo desde Nansha, ambos en la bahía de Shenzhen; repotenciar su cobertura desde el Este de China -introduciendo una conexión directa desde Shanghai hacia la Costa Oeste de la región.

Lo anterior complementa la conexión directa desde Ningbo lanzada a comienzos de 2016- e igualmente entregar mayor flexibilidad a sus clientes al ofrecer doble recalada en la mayoría de los puertos base.

Las exportaciones se beneficiarán de igual manera al incluirse además tramos directos desde San Antonio y San Vicente a Taiwán y el Sur de China.

La ruta entre la Costa Oeste de América Latina y Asia es uno de los principales corredores en el movimiento de productos frescos, como lo son las frutas y el pescado, así como para la importación de la mayoría de los productos que llegan a Latinoamérica, tales como electrónicos, automóviles, textiles, muebles, productos para la construcción y otros.