Seaspan Corporation, una empresa que se dedica al arriendo de portacontenedores, aseguró que no aceptará la solicitud de Hanjin Shipping para bajar la tasa de los arriendos de las nacces en un 30%. La negativa constituye un golpe a los esfuerzos de la naviera por reestructurar su deuda.
Según una nota de Bloomberg, la armadora estaría dispuesta a arrendar nuevas embarcaciones con un consumo menor de combustible para ayudar a Hanjin a mejorar su competitividad.
Gerry Wang, CEO de Seaspan, señaló a Bloomberg que “no aceptamos ningún recorte de tasas. Nunca lo hemos hecho. No vamos a tolerar un contrato de renegociación, cualquier petición de recorte de tasas es ilegal por las leyes internacionales”.
Hanjin Shipping está en conversaciones con los propietarios de buques para reducir el valor de los arriendos como un requisito de sus acreedores a cambio de más fondos que le permitan mejorar su situación financiera.
Hanjin Shipping dijo a Bloomberg que están haciendo todo lo posible para que Seaspan acepte su propuesta, a fin de “lograr el mejor resultado como sea posible”.
Hanjin está intentando bajar la tasa de arriendo de 60 naves entre portacontenedores y graneleros que pertenecen a 22 armadores. La naviera de igual modo quiere conseguir que sus acreedores y tenedores de bonos participen del plan de reestructuración.
