Por Sebastián Betancourt
@PortalPortuario
Sociber ha tenido un año auspicioso en cuanto a las reparaciones y mantenciones que se realizan en el Dique Valparaíso III. La compañía ha logrado captar nuevos clientes al abrirse paso en el mercado internacional, lo que se evidenció tempranamente este 2025 con la llegada de un llamativo buque container-pax que arribó desde la Polinesia.
Eduardo Rubilar, capitán del Dique Valparaíso III de Sociber, dijo en conversación con PortalPortuario que “para nosotros este año ha sido muy auspicioso, particularmente porque conseguimos nuevos mercados. La primera nave del año vino desde Papeete, lo que significó cruzar la Polinesia para venir a trabajar a Chile. Este servicio se lo levantamos a un dique en Australia y creemos que ese cliente se fue muy satisfecho con los trabajo y eso nos ha mostrado a otros lados del mundo como empresa, lo que nos tiene súper orgullosos”.
“Con los clientes locales estamos muy satisfechos. La verdad es que tenemos una tremenda demanda y para el próximo año ya lo tenemos medio comprometido, así que ha sido un año bien auspicioso en ese sentido y esperamos seguir así. Nuestras capacidades están a tope y estamos trabajando a full. Hoy podemos ver en la bahía el Ro-Ro Esperanza de Navimag, una nave de 150 metros que está cubriendo completo el dique y estamos prontos a terminar ese proyecto la próxima semana”, añadió.
Consultado por los desafíos de la reparación naval, Rubilar aseguró que el crecimiento de las naves demanda un esfuerzo económico cuantioso para poder contar con artefactos de mayor tamaño, por lo que la decisión de adquirirlos depende del requerimiento de estos servicios.
“Como se ve, los buques post panamax que tienen mayores esloras y mayores mangas demandan de astilleros de mayores capacidades. Obviamente, para la industria de los diques el crecer en torno a la capacidad de poder recibir ese tipo de naves es un tremendo desafío y si no se tiene la clientela suficiente, la inversión es tremendamente alta y hace que sea difícil. Eso lo tienen que analizar desde otra perspectiva los directorios de las distintas empresas que cuentan con este tipo de artefactos navales”, explicó.
En esa misma línea, Rubilar observó que tanto los diques flotantes como aquellas empresas que realizan carena en dársenas o en tierra están teniendo una alta demanda, por lo que el país ya tendría la necesidad de ampliar sus capacidades, pensando que también hay competidores en Perú y Brasil.
Asimismo, Eduardo Rubilar sostuvo que si las empresas del sector no pueden crecer tendrán que buscar la diferenciación incorporando nuevas tecnologías, dando un mejor servicio al cliente y entregando más rápido los proyectos.
