Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters
El constructor naval alemán ThyssenKrupp Marine Systems (TKMS) espera decidir en las próximas semanas si adquiere el astillero vecino German Naval Yards Kiel (GNYK), informó su director ejecutivo Oliver Burkhard, mientras el grupo evalúa expandirse para atender la creciente demanda.
TKMS, que se escindió de su matriz Thyssenkrupp, ya había comprado en 2022 al astillero insolvente MV Werften, mientras que una eventual adquisición de GNYK aumentaría aún más su capacidad en un contexto de incremento del gasto en defensa por parte de los gobiernos.
Las conversaciones con GNYK, que pertenece al grupo naviero francés CMN Naval, están actualmente en curso, mientras que Burkhard señaló que TKMS se encuentra en lo que denominó una etapa previa de revisión para evaluar si una compra tendría sentido.
“Para nosotros, sería una buena oportunidad, pero no es imprescindible. Y considero importante que sepamos muy pronto si vale la pena profundizar las conversaciones”, expresó Burkhard a los periodistas tras presentar los resultados anuales. TKMS ofrece una perspectiva moderada
Como muestra de lo atractivo que se ha vuelto el sector de defensa naval, Rheinmetall, el mayor fabricante de municiones de Europa, acordó en septiembre adquirir la división de buques de guerra de otro astillero alemán, el Grupo Luerssen, por alrededor de 1.350 millones de euros (1.570 millones de dólares).
Las acciones de TKMS se mantuvieron estables el lunes después de que la compañía ofreciera una previsión cautelosa de ganancias para 2026, subrayando su dependencia de grandes pedidos individuales y de calendarios de pago que en ocasiones se extienden por varios años.
La empresa espera un beneficio operativo ajustado de entre 100 y 150 millones de euros en el ejercicio fiscal que concluye en septiembre de 2026, frente a los 131 millones de euros generados en 2025 y los 143 millones de euros pronosticados para el próximo año por analistas en una encuesta facilitada por la propia compañía.
TKMS se ha beneficiado del aumento del gasto en defensa, impulsado por cambios en la política exterior de Estados Unidos que están ejerciendo mayor presión sobre Europa para reforzar sus propias defensas frente a Rusia, que continúa librando la guerra en Ucrania.
Esto ha contribuido a elevar la cartera de pedidos de TKMS a 18.200 millones de euros al cierre de septiembre, más que triplicándose en los últimos cinco años.
