Por medio de una declaración, la Unión Portuaria de Chile y la “Agrupación de Trabajadores por una Mejor Reforma Laboral” emitieron una declaración pública luego de reunirse en Santiago, instancia en donde acordaron de forma unánime rechazar el proyecto impulsado por el Gobierno. Lo anterior, de acuerdo a los sindicatos, se debe a que la iniciativa “no representa ni considera la opinión de los trabajadores”.
“El proyecto no resuelve las justas demandas y necesidades de las organizaciones sindicales y la clase trabajadora. No se dice nada de la ‘Negociación Ramal’, del despido por ‘necesidades de la empresa’, el ‘pago de gratificaciones’, el ‘subcontrato’, el ‘reajuste mínimo por IPC’ entre otras demandas”, advirtieron.
Según los organismos “el proyecto que acaba de ser aprobado por la Comisión de Trabajo del Senado incorpora nuevos retrocesos a los ya contenidos en el proyecto aprobado por la Cámara de Diputados”.
Los trabajadores alegan que el proyecto del Gobierno “que en su origen ya era malo” “empeora día a día”. En ese sentido, enumeraron una serie de “avances” que, a juicio de las organizaciones” se han traducido en “retrocesos”.
“Lo que se ha mostrado a la opinión pública como avances del proyecto se anulan frente al grave daño que se hará a los trabajadores con medidas como el aumento de la jornada de trabajo a 12 horas diarias, a 7 días corridos, la eliminación del tope diario de horas extras, la exclusión del tiempo de cambio de vestuario de la jornada laboral, la exigencia de quórum para negociar, la reposición del descuelgue individual después de iniciada la huelga, la duplicación de las causales para proporcionar ‘equipos de emergencia’, la suspensión de la negociación colectiva, la eliminación del pago de indemnizaciones adicionales en caso de despido antisindical, la prohibición de huelga a empresas estratégicas y la reanudación de faenas por decisión judicial sin eliminar la amplitud de las causales”, indicaron.
A su vez, los distintos organismos sindicales se quejaron de la falta de legitimidad del Congreso Nacional frente a la ciudadanía tomando como ejemplo los casos de financiamiento irregular de las campañas políticas.
“Este pésimo proyecto de Reforma Laboral será ahora analizado por la Sala del Senado de la República, instancia que carece de legitimidad frente a la ciudadanía que como es de público conocimiento varios de sus miembros ‘trabajan’ desde el parlamento para las mismas empresas que financian sus campañas. Esas mismas conciencias cooptadas por los vínculos con el dinero hoy están decidiendo el futuro de millones de trabajadores y trabajadoras del país”, acusaron.
Por último, los gremios de trabajadores exigieron una nueva discusión para esta reforma, a fin de que se garantice que su construcción sea “transparente”.