La Guardia Costera de Grecia irrumpió en la nave Arina I y detuvo a su capitán por lo que se supone fue el secuestro de tres personas.
El operativo tuvo lugar el 10 de febrero cuando, el personal de la Autoridad Marítima abordó al tanquero y lo desvió a Quíos.
Tras la detención del capitán y del jefe de máquinas, se llevó a tierra a un capitán y un ingeniero filipino, además de un ingeniero griego, los cuales habrían permanecido contra su voluntad en el buque, luego de haberlo abordado como inspectores, ya que el Arina I pretendía ser vendido.
Los tres secuestrados denunciaron que el capitán los había enrolado como petroleros y limpiadores contra su voluntad para cumplir los requisitos de la tripulación.
El capitán zarpó entonces para escapar de la prohibición impuesta por el ParisMoU al buque, que le impedía hacer escala en puertos europeos.
El buque fue inmovilizado en septiembre de 2023 durante 83 días debido a las 42 deficiencias detectadas a bordo durante una inspección. El buque fue liberado con la condición de que navegara a Dubai para ser reparado.
En lugar de ello, el buque se dirigió a Turquía, momento en el que, en enero de 2024, el Memorando de Entendimiento de París emitió una prohibición permanente sobre el buque por incumplimiento de las condiciones y por no reparar el buque.
Según los medios de comunicación griegos, los propietarios tenían intención de vender el buque a una parte griega. El buque había zarpado con destino a Turquía, donde debían completarse la venta y la entrega del buque. El comprador había enviado a las tres personas a inspeccionar el buque antes de que se completara la entrega.
Al parecer, el capitán del Tanquero dijo a los tres inspectores que trasladaría el buque a un fondeadero de Esmirna, pero en lugar de ello se hizo a la mar, manteniendo a los tres a bordo para cumplir los requisitos de tripulación. El capitán pretendía llevar el barco a Egipto.
El ingeniero griego a bordo, ahora detenido, se puso en contacto con el centro de operaciones del Ministerio de Transportes Marítimos de Grecia e informó del incidente. Los guardacostas helenos interceptaron el buque con una patrullera cuando se encontraba el sábado a unas 4 millas náuticas al oeste de Quíos.
Las autoridades griegas han detenido al capitán por infracción del artículo 322 del Código Penal, relativo al “Secuestro”, y han retenido a Tanquero mientras se llevan a cabo las investigaciones de la fiscalía.