Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters

Los fabricantes de automóviles que transportan sus vehículos a Estados Unidos podrían enfrentar costos adicionales de entre 200 y 300 dólares por unidad, según declaró el CEO de Wallenius Wilhelmsen, Lasse Kristoffersen, a Reuters, ya que la compañía busca trasladar a sus clientes las nuevas tarifas portuarias impuestas por Estados Unidos.
Los costos adicionales, más altas de lo esperado para buques construidos en el extranjero, entraron en vigor a mediados de octubre como parte de una disputa comercial entre China y Estados Unidos. Esto llevó a Wallenius Wilhelmsen -que opera buques tipo roll-on/roll-off para movilizar automóviles y maquinaria pesada a nivel mundial- a retirar su proyección financiera.
“Tenemos claro que esta factura representa un costo adicional que se nos ha impuesto y que debemos trasladar a nuestros clientes”, declaró el director ejecutivo Lasse Kristoffersen.
Un acuerdo alcanzado a fines de octubre entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el mandatario chino, Xi Jinping, otorgó una prórroga de 12 meses a las tarifas recíprocas impuestas a los navíos de cada país, retrasando cambios que podrían costar millones de dólares a las empresas navieras y alterar los cronogramas de los buques.
Sin embargo, Wallenius Wilhelmsen advirtió que aún no está claro si la suspensión incluye las tarifas portuarias para los buques tipo roll-on/roll-off, alertando que su exposición total a costos en el cuarto trimestre podría alcanzar los 100 millones de dólares antes de aplicar medidas de mitigación y compensaciones a clientes.













































