El crucero Norwegian Escape, de la Norwegian Cruise Line, dejó el astillero de Meyer Werf, en Papenburg Alemania, para ser trasladado hasta el Mar del Norte a través del rio Ems, en un viaje de 32 kilómetros.
La travesía de los cruceros, a través de la vía fluvial, puede tardar unas diez a 24 horas dependiendo siempre de las condiciones climáticas de la zona y las naves, además, son maniobradas de popa, a fin de salir del astillero y pasar cuatro puentes de automóviles y ferrocarriles con apenas unos pocos metros de seguridad.
La Norwegian Cruise Line informó que la nave concretó su recorrido en un día, arribando a las 12.30 horas local al puerto holandés de Eemshaven, el sábado 19 de septiembre.
El buque tiene 325.9 metros de eslora; 41,4 metros de manga y 164.600 toneladas brutas, convirtiéndose -con esas dimensiones- en la mayor nave de la flota de Norwegian Cruise Line.
El crucero hará recorridos semanales de siete días desde Miami al Caribe oriental a contar del 14 de noviembre de este año.
Esta es la primera de un total de cuatro naves de la clase Breakaway Plus NCL que serán construidos por Meyer Werft.
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