Por Andrés Orrego Siebert
@PortalPortuario
Los trabajadores portuarios de los terminales carboneros de Chile están preocupados debido al impacto que ocasionará el cierre de las centrales a carbón en el país.
Según el último anuncio del Ministro de Energía, Juan Carlos Jobet, se espera que, al 2025, 18 de las 25 centrales de Chile estén inactivas.
Juan Pablo Pizarro, vocero de la Unión Portuaria del Centro y presidente del Sindicato de Estibadores Quintero-Ventanas, aseguró que, si bien no están en contra del cambio de la matriz energética y de que la gente pueda vivir en un ambiente libre de contaminación, les complica el hecho de que no haya un plan de mitigaciones y compensaciones para los trabajadores que mueven este producto ni para las comunas de las denominadas “zonas de sacrificio”.
De acuerdo al dirigente, solo en Puerto Ventanas se perderán 8 mil turnos anuales que derivan de la atención de las 34 naves que recalan a ese terminal del litoral norte de la Región de Valparaíso.
Pese a lo anterior, en Puerto Ventanas no habría un gran impacto económico en las remuneraciones de los portuarios, ya que todos los trabajadores están contratados y no hay eventuales. No obstante, Pizarro advirtió que si no se reemplaza ese volumen de carga podría haber impactos laborales.
“Nosotros como trabajadores y ciudadanos de estas zonas de sacrificio tenemos una postura de que el carbón, en base a los acuerdos internacionales, va a la baja y se termina, pero en esa misma línea creemos que hay una responsabilidad del Estado, porque fue el que decidió con sus políticas de energía, tener termoeléctricas a base a carbón. Entonces, por muchísimas décadas, los trabajadores de Huasco, Tocopilla, Ventanas y Coronel, hemos estado descargando las naves para que se produzca la energía y, pese a esto, el Estado no nos ha consultado a los trabajadores portuarios para que este proceso de cierre de centrales se lleve a cabo”, señaló.
“Los políticos, los ministros, los diputados, los senadores han hablado de la descarbonización, pero no de las consecuencias laborales que pueda tener en estas cuatro ciudades puerto. No han hecho ningún reconocimiento a los trabajadores portuarios, solo nos invitaron a un taller al Ministerio de Energía al inicio del proceso, o sea nos invitaron a conversar cuando el tema estaba zanjado y nosotros, creemos, que tenemos algo que decir sobre la descarbonización, porque la transición también tiene que ser con los trabajadores portuarios y, por eso, estamos haciendo encuentros para desarrollar nuestras demandas, porque para avanzar a la descarbonización tiene que traer una mitigación para los trabajadores portuarios y una reconversión en las cargas”, añadió.
“Los trabajadores portuarios carboneros estamos en alerta. No vamos a esperar hasta el 2025 para negociar. Queremos dejar este tema instalado, aunque sabemos que con este Gobierno poco y nada puede hacer, pero el próximo presidente de Chile tiene que acercarse a hablar con la Unión Portuaria de Chile y los terminales carboneros”, enfatizó.
Consultado sobre la posibilidad de que este Gobierno o el que sigue exprese que “es un problema entre privados” traer o no nuevas cargas a las instalaciones portuarias que mueven carbón, Pizarro señaló que esa es una respuesta esperable desde la administración pública.
“Efectivamente, el Estado va a responsabilizar o guiar a los privados a que busquen nuevas cargas, porque son acuerdos comerciales. El problema es que en Puerto Ventanas se han buscado cargas alternativas, pero la burocracia que existe para que se desarrollen otro tipo de labores como el movimiento de cargas limpias representan un freno, así como en el desarrollo de infraestructura y el sector portuario tiene que tener un crecimiento en Chile, porque nuestros puertos se están quedando chicos frente a una gran competencia internacional”, apuntó.
Según el dirigente, la mitigación que solicitarán no solo será para los trabajadores, sino para las comunas que acogieron centrales termoeléctricas.
“Nosotros como trabajadores portuarios del carbón estamos concientes de que el carbón tiene que desaparecer, nadie está defendiendo al carbón, lo que sí pensamos que esta transición energética debe tener compensaciones, porque solo en Ventanas serían 8 mil turnos menos en 34 naves anuales, mientras que en Huasco es mucho más, porque el 90% de la carga es carbón y ese terminal junto a Tocopilla serán los más afectados y en varias de estas comunas la actividad de las termoelécricas no dejó nada, entonces no es posible que se vayan sin compensar o mitigar”, señaló.
En los próximos días, representantes de los 1.400 trabajadores portuarios que atienden naves carboneras en Chile, sostendrán un encuentro en Ventanas para seguir con la discusión de esta materia.
