Los trabajadores portuarios del puerto británico de Liverpool votaron a favor de la huelga debido a temas salariales, amenazando con ralentizar los flujos comerciales e infligir más dolor a una economía británica que ya enfrenta tensiones laborales y logísticas.

El Puerto de Liverpool, propiedad de Peel Ports, es la cuarta puerta de entrada más grande de Gran Bretaña para el comercio marítimo y una parada vital para el comercio transatlántico. No se especificó un cronograma, pero cualquier paro laboral se sumará a las interrupciones que se esperan de una huelga de ocho días planeada a fines de este mes en Felixstowe, la terminal de contenedores más concurrida del país.

El cierre de los puertos del Reino Unido podría ocurrir durante la época más activa del año para el envío global, justo cuando los minoristas intentan abastecerse para las compras de regreso a clases y las vacaciones de fin de año. El momento también es malo para la economía británica en general, donde el costo de vida se está disparando y las advertencias de recesión son cada vez más fuertes, según Bloomberg.

El aumento de la inflación ha llevado a los sindicatos a buscar mejores acuerdos salariales de los operadores portuarios. El sindicato Unite, que representa a los trabajadores tanto en Liverpool como en Felixstowe, rechazó un aumento salarial del 7% junto con un bono de 500 euros ofrecido por los propietarios de Felixstowe, CK Hutchison, esperando un mejor trato.

Solo la huelga de Felixstowe podría interrumpir más de USD 800 millones en el comercio, según el análisis ALPS Marine de Russell Group.Las líneas navieras se están preparando para más cuellos de botella. Maersk anunció un plan de contingencia que afecta a 11 buques que prestan servicios en Felixstowe, cuyos horarios “se adelantarán o retrasarán significativamente para que podamos maximizar la mano de obra disponible inmediatamente antes y después del período de huelga”.

El experto en transporte de contenedores Lars Jensen, en una publicación de LinkedIn, dijo que la congestión portuaria puede empeorar en otras partes de Europa porque los transportistas “probablemente tendrán que descargar carga con destino al Reino Unido en los principales centros como Amberes y Rotterdam”.

Si las huelgas continúan, empeorarán un verano británico ya difícil, en el que los trabajadores ferroviarios ya se han marchado en múltiples ocasiones. Mientras tanto, los aeropuertos y las aerolíneas se están recuperando de la escasez de personal y los problemas laborales, lo que resulta en cancelaciones masivas de vuelos.

La escasez de camioneros y los atascos en el transporte marítimo mundial el año pasado provocaron problemas en la cadena de suministro en Felixstowe antes de la ajetreada temporada de compras navideñas, con algunos buques portacontenedores desviados a otros puertos.