Por Redacción PortalPortuario.cl
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El Puerto de Recife recibió a los estudiantes y profesores del curso de Ingeniería de la Complejidad de la UNICAP (Universidad Católica de Pernambuco), quienes presentaron los proyectos desarrollados en el marco del Convenio de Cooperación Técnica firmado el 20 de julio con una duración de cinco años y que incentivará el desarrollo de nuevas soluciones para las operaciones portuarias en el fondeadero de Recife.
El acuerdo incluye el curso de Ingeniería de la Complejidad, una formación que fomenta el análisis, la comprensión y el desarrollo de soluciones a problemas prácticos. En 2021, cuatro estudiantes comenzaron a trabajar en colaboración con el puerto e hicieron una pasantía en el fondeadero por un período de tres meses y medio. Durante ese tiempo, recolectaron información, materiales y pudieron observar las operaciones portuarias en la práctica.
Los alumnos trabajaron sobre cuatro demandas principales que presentaba el puerto, la necesidad de batimetría recurrente, la mejora del sistema de seguimiento de las condiciones ambientales en el recinto portuario, un filtro para actuar dentro del sistema de drenaje del muelle y el desarrollo de una tolva ecológicamente más eficiente. .
“Lo que está haciendo el curso de Ingeniería de la Complejidad en el Puerto de Recife es estudiar los puntos complejos que no tenemos solución inmediata en el mercado y desarrollar eso para que podamos mejorar la eficiencia de la operación portuaria. Además, los estudiantes tienen una ganancia diferenciada en la experiencia científica que desarrollan dentro del fondeadero”, reforzó Tito Moraes, presidente del Puerto de Recife.
Los alumnos desarrollaron una solución que resolverá dos de los problemas que presenta el fondeadero, un prototipo de embarcación propulsada por energías renovables y controlada remotamente para realizar batimetría y seguimiento ambiental en tiempo real.
A través de sensores instalados en el buque, será posible analizar los parámetros ambientales del agua y el aire en la zona portuaria, así como monitorear las profundidades de los atraques, haciendo más eficiente el atraque y desatraque.
El movimiento y producción de energía en el interior de la embarcación fue diseñado para evitar impactos ambientales. Los investigadores ya han realizado pruebas con paneles solares y buscan la mejor fuente renovable, tanto para el suministro como para la generación de energía que mantendrá en funcionamiento los equipos.
Al final de las operaciones de carga y descarga, el muelle siempre se lava. Toda el agua de esta limpieza pasa por el sistema de drenaje de la terminal y desemboca en los afluentes que operan en la región. Los estudiantes desarrollaron un filtro químico que se conectará al sistema de drenaje del muelle para filtrar de manera más eficiente líquidos potencialmente agresivos.
Finalmente, los estudiantes trabajaron en una solución para partículas en el aire durante operaciones con elementos gaseosos, fertilizantes y otros productos a granel. Se desarrolló lo que se denominó “tolva sostenible”, que funciona con un sistema ciclónico. Los sensores instalados en la tolva identificarán la cantidad de partículas dispersas en el aire y, si es necesario, succionarán este material de regreso a la tolva. En pruebas realizadas con gases se redujo en un 80% la unta del producto.