Rodrigo Pinto es abogado, ex gerente general de la Empresa Portuaria Arica.
Hace un año, el 11 de octubre de 2021, en el Complejo Fronterizo Chungará, se firmó un acuerdo de descuentos tarifarios inéditos entre el Puerto de Arica y la Administración de Servicios Portuarios de Bolivia (ASPB). A través de este acuerdo se estableció una rebaja de 42% en promedio para las tarifas de 25 servicios portuarios que se prestan a la carga boliviana de importación por un plazo de 3 años de vigencia, es decir hasta octubre de 2024.
Este acuerdo ha permitido crear condiciones de certidumbre comercial y económica para el comercio exterior boliviano y para las operaciones portuarias en Arica. Así, los importadores bolivianos pueden optar y gozar de las condiciones tarifarias y portuarias más convenientes para la transferencia de su carga, inclusive a la tarifa cero (beneficio que se otorga a todo importador que programe el pronto despacho de su carga), a través del Puerto de Arica y de la Ruta 11Ch que une el puerto con el paso fronterizo Chungará-Tambo Quemado.
¿Cómo se logró este acuerdo? Con diálogo, conversaciones francas, técnicas y honradas; entre las empresas, tanto las chilenas (EPA y TPA), como la boliviana (ASPB). Dejando a un lado las ideologías y la política, poniendo la seguridad de las operaciones, la calidad de los servicios, las consideraciones comerciales y económicas, y el mutuo beneficio de las partes, el centro del debate fue cuidar que todos los acuerdos beneficien a todas las partes de manera equitativa y en beneficio del cliente final.
No fue fácil, porque, ha de saberse, no faltaron quienes se restaron, inclusive hubo quienes manifestaron oposición a los mismos. Sin embargo, finalmente con la tenacidad y la fortaleza de la razón y la buena fe de sus interlocutores y representantes, las empresas lograron arribar a buen puerto.
El significado de este acuerdo es la mejora continua de toda la cadena logística y todos los actores del comercio internacional. Es decir, los dueños de la carga, los importadores, los gremios de comercio exterior, los agentes, los representantes, los transportistas, las entidades estatales, las aduanas, quienes deben poner de su parte. En ese marco, se trata de una tarea colectiva y permanente. Ese esfuerzo colectivo ha contribuido de manera decisiva para que el Puerto de Arica, la ASPB, los transportistas y los gremios y asociaciones del comercio exterior boliviano, mantuvieran la cadena de suministros operativa y sin interrupciones durante los días más oscuros de la pandemia. Es decir, si se quiere, se puede.
¿En números, qué significa esto? A través de este instrumento, la carga de importación boliviana cuenta con tarifas preferenciales. De esta manera, se consolida el proceso de normalización que se inició el 2019, a través del cual se logró ordenar el Puerto, aplicando el Manual de Servicios y Tarifas al 100% de sus usuarios y el aumento de la capacidad de transferencia de 3 millones de toneladas a 4,5 millones de toneladas.
Este acuerdo, entre el Puerto de Arica y la ASPB, demuestra más allá de toda duda, que entre chilenos y bolivianos se puede coordinar y articular formas de trabajo conjuntas y complementarias. El centro ha sido la confianza público-privada para lograr una alianza público-privada, en que, cada uno en su rol, pero con objetivos comunes, pueden alcanzar y construir las confianzas y el progreso para todos.