La Policía italiana informó la incautación de 5,3 toneladas de cocaína al detener un barco granelero procedente de América del Sur y a un barco de pesca italiano que estaba siendo utilizado para la transferencia ilícita en el mar.

La Fuerza Naval y Fuerza Aérea de Italia rastrearon al barco, sin nombre registrado, durante unos días cuando llegaba a la costa del país europeo. Durante la jornada del 19 de julio de 2023, determinaron que este navío estaba posicionado en los límites de las aguas territoriales. Mientras vigilaban el granelero, un pesquero italiano apagó su señal de localización AIS y observaron que desde el la nave de transporte se arrojaban paquetes hacia el agua.

Luego, las fuerzas navales interceptaron al pesquero, encontrando la cocaína escondida y detener a las cinco personas que iban a bordo.

Asimismo, las autoridades italianas comenzaron a perseguir a la nave granelera, que en ese momento intentaba entrar en aguas internacionales con dirección a Turquía. Al ser alcanzada, se la llevaron a Palermo para realizar la investigación correspondiente.