Por Andrés Orrego Siebert
@PortalPortuario
La Empresa Portuaria Chacabuco (Emporcha) está orientando sus inversiones para mejorar su infraestructura con la finalidad de dar soporte a la exportación de biomasa, específicamente, la que produce la salmonicultura, una de las principales industrias de la Región de Aysén.
Felipe Candia, gerente general de Emporcha, detalló a PortalPortuario que el año recién pasado fue un buen periodo en términos comerciales, con un movimiento de carga estable, así como también con un aumento de naves atendida, tanto en los Muelles de la Dirección de Obras Portuarias como en los comerciales.
Los buques que protagonizaron la mayor operativa fueron, justamente, los dedicados a la industria del salmón, razón por la cual la estatal ha determinado producir mejoras y mantenimiento en las instalaciones empleadas por esa actividad comercial.
“La carga se mantuvo relativamente estable respecto de 2022. El número de naves que atendimos fue de 5.151; sin embargo, fue un año comercial, más que nada, por otros servicios que no están relacionados con la ocupación de los sitios, porque, en comparación a las otras portuarias, el modelo de negocio se centra en la cantidad de carga movilizada, pero el nuestro está más basado en la cantidad de naves que atendemos como las que prestan servicios a la industria acuícola, en particular, a la salmonera y, por eso, tenemos una alta dependencia de esa actividad”, apuntó.
Candia comentó que “los ciclos del salmón nos impacta mucho en los resultados que tenemos en los muelles, porque es la industria del salmón la que requiere mayores servicios cuando está en la parte alta de su ciclo. Eso implica que gran parte de las naves que se ocupan son pequeñas, que no superan los 23 metros de eslora, y, por lo tanto, son muchas naves las que requiere la industria para desarrollar su actividad”.
En ese aspecto, el ejecutivo recordó que “más del 50% de la biomasa que se exporta desde el país se produce en la Región de Aysén y, con esto, me refiero a la industria salmonera, la cual siempre requiere de algún servicio y gran parte de esos servicios vienen desde la Región y salen de nuestros puertos”.
El gerente general de Emporcha afirmó que dada esta actividad intensa, en 2023 hubo un incremento de 23% en los ingresos registrados en los muelles DOP.
Con esto a la vista, Candia sostuvo que “una de las primeras cosas que es primordial para nosotros es mantener la infraestructura que ya existe. Tenemos dos muelles en las que atendemos a naves que prestan servicios a la salmonicultura más un muelle flotante que están en el terminal comercial de Puerto Chacabuco y uno de esos muelles necesita un mayor requerimiento de mantención”.
“Hemos tenido que hacer esfuerzos de mantención mayores para que la industria del salmón tenga donde operar. No lo hacemos solo por esta industria, sino que ahí también atendemos naves de pesca blanca, por ejemplo, pero en la medida que podamos atender el desarrollo de la industria acuícola, eso trae consecuencias positivas para la región, porque esta es la gran industria que tiene la Región de Aysén y, por lo mismo, tenemos la obligación de tener la infraestructura para que esta actividad opere”, afirmó.
En este orden, el gerente general de Emporcha dijo que es el Muelle 2 el que requiere una mayor atención en materia de mantenimientos, mientras que en el 1 se mantienen las operaciones para otras industrias y con buques de dimensiones más grandes.
“El muelle 1 es el que recibe a las naves mayores, de hasta 190 metros. Ahí se hacen los embarques de mineral, recaladas de cruceros, pero es el muelle 2, el que recibe naves más pequeñas, el que nos tiene preocupados de mejorar su condición, por lo que hemos redireccionado más recursos para mantener ese muelle”, enfatizó.
Rol social
Más allá de las operaciones comerciales, un rol que cumple la portuaria sureña es el de conectividad, lo que redunda en la idea de soberanía nacional en una zona, prácticamente, aislada en la que las condiciones de vida son complejas solo por la geografía accidentada y las largas distancias y, en un país centralista, por su lejanía de la capital, Santiago.
Al respecto, Candia señaló “que hemos conversado con el equipo que, si nosotros fallamos en algún minuto, si fallamos en la administración de los muelles, de las rampas, si falla la iluminación o suceda cualquier cosa que impida que la nave de conectividad pueda recalar en alguno de los lugares que administramos, puede que alguna persona no llegue al hospital y lo pongo en esos términos, porque es así de importante”.
“También tenemos a cargo el abastecimiento de la región. Hay gente que recibe sus mercancías, sus alimentos en Chacabuco y los consume en Villa O’Higgins que queda a 600 kilómetros al sur, esa es la relevancia de lo que hacemos acá”, subrayó.