Por Redacción PortalPortuario
Frutas de Chile dio cuenta que la huelga iniciada por los trabajadores de los puertos de la Costa Este de Estados Unidos y el Golfo se encuentra repercutiendo en las actividades comerciales de Chile. Esto luego que más de 580 contenedores con frutas frescas chilenas quedaran varados en Panamá o a la deriva a bordo de buques.
Cabe recordar que en la madrugada del martes 1 de octubre comenzó un paro de portuarios tras no alcanzarse acuerdos entre la Asociación Internacional de Estibadores (ILA) y la United States Maritime Alliance (USMX). Lo tratado luego que no se generara un consenso relacionado a un nuevo contrato de seis años, lo que se vio truncado por diferencias salariales.
La movilización afecta la normal operación de 36 puertos, siendo la primera del mencionado sindicato desde 1977. A nivel logístico, la paralización tendría consecuencias en cuanto a la programación de rutas de las naves y de contenedores que podrían quedar atrapados en el conflicto, así como el costo y deterioro de los productos.
En el caso de la fruta chilena, existe preocupación por la extensión que podría tener el conflicto y debido a la existencia de embarques que están llegando esta semana a la Costa Este de Estados Unidos.
“Lamentamos que no se haya alcanzado un acuerdo entre las partes, y hoy la logística mundial se vea enfrentada al desafío que contempla una paralización de los puertos de toda la costa este de Estados Unidos. Como Frutas de Chile nos encontramos monitoreando muy de cerca la situación, ya que si el conflicto se extiende en el tiempo podría afectar a frutas que se encuentran en tránsito”, indicó Miguel Canala-Echeverría, gerente general de Frutas de Chile.
“Actualmente, nuestros registros nos indican que estarían siendo afectados más de 580 contendores de frutas frescas chilenas, algunos de los cuales habrían sido dejados en Panamá ante imposibilidad de continuar a destino o bien que no podrán desembarcarse al llegar a la costa este, quedando el buque a la gira con los costos asociados y la pérdida de los programas de entrega a los distribuidores en EEUU”, agregó.
En línea con lo dado a conocer por Canala-Echeverría, estos contenedores correspondería a aproximadamente 11.743 toneladas de frutas de frescas chilenas. De estas, 11.362 toneladas corresponden a cítricos, 177 toneladas a kiwis y 204 toneladas a paltas, lo que estaría avaluado en un valor FOB estimado de USD 37 millones de dólares.
“Hay que considerar que las navieras tienen un itinerario que cumplir y la norma les permite derivar la carga o dejar la carga en el puerto más cercano al programado si la situación lo amerita. Así las cosas, por ejemplo, si un barco no puede desembarcar la fruta en los puertos de la costa este y su siguiente escala es un puerto en Europa, lo más probable es que la nave espere un tiempo prudente y continúe a su próximo destino con el consiguiente deterioro de la carga y costo para el productor y exportador chileno”, concluyó el representante de los fruteros chilenos.