Gonzalo Collado es Gerente General de Senator International Chile

Chile enfrenta desafíos considerables en materia de logística y tecnología. En un mercado cada vez más interconectado, la modernización tecnológica del sector es crucial para consolidar el desarrollo económico y la integración de nuestro país en las cadenas globales de valor.

Actualmente, existe una importante brecha en la adopción de herramientas tecnológicas avanzadas que optimicen los procesos logísticos. Muchas empresas en Chile aún operan con sistemas tradicionales que no permiten gestionar eficientemente las complejas operaciones que el comercio moderno demanda. Aquí es donde las herramientas tecnológicas World Class, como el Enterprise Resource Planning (ERP) y el Customer Relationship Management (CRM), juegan un papel transformador.

El ERP (Enterprise Resource Planning) es una herramienta que integra los diferentes departamentos de una empresa en un único sistema, permitiendo gestionar desde la producción hasta las finanzas y el inventario en tiempo real. Para el sector logístico chileno, que enfrenta grandes desafíos en cuanto a la planificación de recursos y la optimización de inventarios, el ERP puede marcar la diferencia. Al contar con información en tiempo real y optimizar la cadena de suministro, las empresas pueden mejorar su toma de decisiones, reducir los costos de almacenamiento y evitar las ineficiencias provocadas por la falta de visibilidad en los procesos.

Por su parte, el CRM (Customer Relationship Management) permite ofrecer una experiencia más personalizada y ajustada a las necesidades del mercado. El CRM almacena toda la información relevante de los clientes en una única base de datos accesible para todos los empleados de la empresa. Esta información incluye datos como el historial de compras, interacciones previas, correos electrónicos, llamadas, quejas, y preferencias. Al centralizar la información, permite que todos los departamentos trabajen de manera coordinada y con una visión completa del cliente. Además, esta herramienta permite automatizar tareas rutinarias para que los empleados puedan centrarse en actividades de mayor valor.

Sin embargo, la adopción de estas tecnologías no está exenta de desafíos. Chile aún enfrenta una barrera significativa en cuanto a la capacitación del capital humano para utilizar estas herramientas de manera efectiva. La falta de profesionales con habilidades digitales avanzadas, así como la resistencia cultural al cambio, han retrasado la adopción de sistemas tecnológicos de última generación.

Para que Chile pueda superar estos desafíos, es imperativo que tanto el sector público como el privado colaboren en iniciativas que impulsen la modernización logística y tecnológica. A nivel gubernamental, es necesario priorizar la inversión en infraestructura, así como en la creación de políticas públicas que incentiven la adopción de tecnologías World Class. Por otro lado, el sector empresarial debe entender que invertir en herramientas como el ERP y CRM no es un gasto, sino una inversión estratégica que puede impulsar la eficiencia operativa, reducir costos y mejorar la competitividad a largo plazo.

Chile, con su ubicación privilegiada y su apertura comercial, tiene una oportunidad única para consolidarse como un referente en logística y tecnología en América Latina. Pero para lograrlo, debe abrazar la innovación, capacitar a su capital humano y priorizar la implementación de herramientas tecnológicas que lo lleven hacia una nueva era de eficiencia y competitividad.