Por Redacción PortalPortuario
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La Cámara Naviera Internacional (ICS, por su sigla en inglés) advirtió que los armadores están preocupados por las nuevas normas medioambientales acordadas por los estados miembros de la Organización Marítima Internacional (OMI) y la complejidad que dichos lineamientos podrían presentar para las pequeñas y medianas empresas.
Si bien la ICS señaló que respalda las directrices de la OMI, indicó que “los armadores aún tienen serias preocupaciones sobre la complejidad que podrían llegar a adquirir -las normas-, especialmente las pequeñas y medianas empresas, que podrían tener dificultades para afrontar los costos de cumplimiento”.
“Hasta ahora, la atención se ha centrado en las sanciones por emisiones (las sanciones), pero los incentivos claros (las recompensas) para combustibles más limpios serán igualmente importantes. Son estos incentivos los que motivarán a los productores de combustible a suministrar los nuevos combustibles e infraestructura que permitirán al transporte marítimo cumplir con los objetivos”, explicó la organización.
La Cámara Naviera sostuvo que los gobiernos también deben establecer rápidamente normas claras para estos combustibles más limpios, lo que les dará a los productores la seguridad de que invertir en infraestructura para combustibles verdes es sensato.
Thomas A. Kazakos, secretario general de ICS, comentó que “la OMI debe adoptar formalmente el Marco de Cero Emisiones Netas en octubre para enviar una señal clara a la industria y proporcionar el incentivo necesario para producir estos combustibles más limpios. La industria necesita claridad, simplicidad y detalle en las recompensas”.
“También instamos a quienes cuentan con esquemas unilaterales y regionales, como el RCDE UE, a que acuerden contar con un sistema único, claro y transparente en el marco de la OMI. Esto es fundamental para cumplir con los plazos establecidos”, complementó Kazakos.
La ICS aseguró que ha presentado propuestas a la OMI para ayudar a aclarar estas cuestiones, incluida una solicitud para reemplazar la palabra “puede” por “debe” para garantizar que se envíe una señal más clara al mercado.
