Por Redacción PortalPortuario
Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) anunció que espera la aprobación para descargar 3 buques con gasolina, diésel y crudo entre el 22 y 26 de julio en la Terminal Sica Sica, la estación marítima que opera la estatal boliviana en Arica, Chile.
Esto en lo que se enmarcaría como una nueva ventana de importación que apunta a reducir las filas por combustible en Bolivia. La operación dependerá de la aprobación de la Gobernación Marítima de Arica.
La faena, coordinada con autoridades portuarias de Chile, se ejecutará bajo estrictos controles de seguridad y con apoyo del equipo operativo de YPFB Transporte, según dio cuenta el Ministerio de Hidrocarburos y Energías (MHE).
En línea con información de MarineTraffic, los petroleros Mishell, Sino Source y Fourney se encuentra a la gira en la bahía de Arica a la espera del visto bueno para conectarse al oleoducto submarino de la terminal. Se contempla que el segundo navío desembarque 41 millones de litros de diésel.
Por su parte, el director de Comercialización e Importación de Hidrocarburos de YPFB, Marco Durán, informó que la estatal petrolera mantiene una logística dinámica y estructurada para garantizar el abastecimiento de carburantes en todo el país, pese a factores adversos como la sobredemanda y las condiciones climáticas.
El ejecutivo detalló que la importación de combustibles depende de las divisas asignadas por el Ministerio de Economía y Finanzas. Una vez definidas, se activa toda una cadena de abastecimiento con proveedores en países como Perú, Chile, Argentina y Paraguay.
“Cuando se abre una ventana de importación, se movilizan hasta 160 cisternas, cada una bajo seguimiento y control, con la aprobación de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), la Dirección General de Sustancias Controladas y la Aduana Nacional”, explicó Durán. Desde las plantas de almacenamiento en Bolivia, se realiza el blending y la posterior distribución a estaciones de servicio, bajo monitoreo del sistema B-SISA de la ANH.
Sobre los actuales problemas de abastecimiento, Durán señaló que Bolivia importa alrededor del 55% de la gasolina y cerca del 90% del diésel, mientras que el incremento en las filas en surtidores se debería -principalmente- a una sobredemanda.
“Estamos distribuyendo el 100% del combustible disponible, pero para reducir las filas de forma más efectiva se requiere una mayor asignación de divisas que permita aumentar la importación más allá del 100%”, afirmó Durán.
El director también informó que se detectaron prácticas irregulares como el acopio y los carguíos repetitivos, los que afectan la planificación de distribución.
“La ANH, mediante el sistema B-SISA, junto al Ministerio de Defensa y el Ministerio de Gobierno, está realizando operativos de control para evitar el acopio ilegal y la reventa de combustibles”, remarcó el ejecutivo de la estatal boliviana.
Con respecto a la logística internacional, Durán reconoció que factores externos, como las marejadas, afectaron temporalmente el flujo de importación. Sin embargo, anunció que entre el 22 y 26 de julio se abrirá una nueva ventana de importación, durante la cual se prevé el arribo de tres buques con gasolina, diésel y crudo.














































