Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters
Estados Unidos amenazó con aplicar restricciones de visado y sanciones como represalia contra las naciones que voten a favor de un plan propuesto por la Organización Marítima Internacional (OMI), el que busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) del transporte marítimo.
Los países miembros de las Naciones Unidas (UN) tienen previsto votar entre el 14 y 17 de octubre la propuesta Marco de Cero Emisiones Netas de la OMI. Se apunta a bajar la cantidad de dióxido de carbono que el sector naviero internacional genera, el cual gestiona alrededor del 80% del comercio mundial y representa cerca del 3% de los GEI a nivel global.
Los grandes transportistas de contenedores, presionados por inversionistas para combatir el cambio climático, coinciden en que un marco regulatorio global es fundamental para acelerar la descarbonización. Sin embargo, algunas de las mayores compañías de buques petroleros del mundo expresaron tener “serias preocupaciones” sobre la propuesta.
“La Administración rechaza inequívocamente esta propuesta ante la OMI y no tolerará ninguna acción que incremente los costos para nuestros ciudadanos, proveedores de energía, compañías navieras, sus clientes o los turistas”, afirmaron en una declaración conjunta el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio; el secretario de Energía, Chris Wright; y el secretario de Transporte, Sean Duffy.
“La propuesta representa riesgos significativos para la economía global y somete no solo a los estadounidenses, sino a todos los estados miembros de la OMI a un régimen fiscal global no autorizado que impone sanciones financieras punitivas y regresivas”, comunicaron.
Los defensores de la propuesta de la OMI han advertido que, sin una regulación global, la industria marítima enfrentaría un mosaico de normativas y costos crecientes sin lograr reducir eficazmente las emisiones de GEI que contribuyen al calentamiento global.
Los funcionarios estadounidenses indicaron en el comunicado que Estados Unidos está considerando tomar represalias contra los países miembros de la ONU que respalden el plan, una amenaza que también han realizado anteriormente.
Eso incluye, potencialmente, bloquear el acceso a puertos estadounidenses de naves registradas en esos países, imponer restricciones y tarifas de visado, y aplicar sanciones a funcionarios que “promuevan políticas climáticas impulsadas por activistas”, según lo remarcado en el documento de la nación norteamericana.













































