Sergio Contreras, presidente del Sindicato de Trabajadores contratados de Muellaje Central (Sitramcen), aseguró que los asociados de su sindicato, integrado por 175 personas, ya se encuentran cansados por el paro que llevan a cabo los miembros de la Federación de Trabajadores Portuarios de Costanera Espigón (Fetraportces), ya que les ha impedido llevar a cabo sus funciones en las dependencias concesionadas por Puerto Central.
El dirigente, en ese sentido, aseveró a PortalPortuario.cl que, pese a recibir un sueldo base cercano a los 300 mil pesos, la extensión de la paralización les generará pérdidas económicas al no recibir el pago de los turnos no realizados en el contexto del conflicto.
“Con nosotros pasa que cuando hay un paro se cierran las entradas al puerto y pasa que se bloquean los accesos, se encienden barricadas, comienzan las amenazas de que si entran les van a pegar, que les van a reventar las casas, que les van a golpear los autos y nosotros nos adherimos a la ley, al Código del Trabajo donde se indica una cláusula de fuerza mayor que dice que si las condiciones de seguridad no están dadas para nuestros socios, nosotros no podemos entrar a trabajar y por eso estamos en el aire, esperando que ellos resuelvan sus temas y como la empresa ya no quiere negociar nada y así sigue el tira y afloja”, aseguró.
A juicio de Contreras, Fetraportces está “sufriendo” sus propias consecuencias de la movilización que lleva a cabo ante la negativa de negociar de Puerto Central.
“Estos muchachos no respetaron el acuerdo del 8 de enero en que se dice que no se negocia nada en paro. A ellos no les gustaron las micros que colocaron, quieren plata ahora como bono de locomoción y otras cosas más como que se les pague a los dirigentes 30 turnos mensuales solo por hacer la charla en la nombrada, entonces la empresa optó por no negociar y exigen el cumplimiento del acuerdo. Fetraportces está sufriendo las propias consecuencias de su paro, porque han tenido peleas entre sus socios, pero también porque son eventuales y al estar parados no ganan nada, ni un peso al revés de los contratados que por lo menos tienen sus sueldos base”, comentó.
En esa línea, Contreras expresó que esperan que las diferencias entre Fetraportces y Puerto Central sean subsanadas a la brevedad, a fin de retomar las labores en el Espigón y, de ese modo, evitar que las navieras dejen San Antonio y opten por Valparaíso, como ya ocurrió en el paro de fines de 2014 e inicios de 2014 que derivó en que uno de los servicios de la Mediterranean Shipping Company retornara a la capital regional.
“Queremos que este conflicto se solucione de una vez, no queremos estar diez días trabajando y diez días parados. Si vamos a estar parados una semana más para que finiquiten este problema y vamos, luego, a trabajar un año tranquilos, perfecto esperamos la semana, pero sino ¿qué hacemos? La solución está de parte de ellos, porque nosotros no somos parte de este conflicto”, señaló.
“Con esto está perdiendo San Antonio y hay un solo ganador que es Valparaíso, porque los buques que no se atienden acá serán atendidos por Valparaíso que es el que está más cerca, pero también somos los trabajadores los que dejamos de ganar, porque los contratados solo recibimos la base, pero perdemos los turnos y los bonos y eso va a generar un impacto”, enfatizó.
5 mil autos
Según Contreras, en Puerto Central se han acumulado 5 mil vehículos, los cuales fueron descargados por trabajadores estables de la empresa, lo que se tradujo en pérdida de turnos tanto para los portuarios contratados y eventuales.
“Ahora, hay 5 mil autos en los patios que fueron descargados por los trabajadores estables, y que no hacen turnos, de PCE. Los oficinistas, las mujeres, los jefes de operaciones y hasta los guardias descargaron autos, lo que no es difícil, pero se demoraron tres veces más de lo que habríamos hecho nosotros, pero lo hicieron y esos son turnos que hemos perdido, por lo menos son tres turnos por persona los que no se hicimos y eso significa entre 90 y 100 mil pesos menos por trabajador”, apuntó.
De acuerdo a lo explicado por Contreras, la operación de descarga fue posible dado que la empresa -después del paro del año pasado- tomó el resguardo de capacitar a toda su planta para realizar faenas portuarias, quedando habilitadas con el llamado carnet rojo para tal efecto.
Amenazas
Sobre los amedrentamientos, Contreras afirmó que no han recibido nada directamente, pero sí por redes sociales. De igual forma, el dirigente hizo ver que no se expondrán a enfrentamiento los cuales -reconoció- podrían producirse si deciden entrar a trabajar al Espigón.
“Están con las amenazas, no lo hacen directamente a nosotros porque saben que somos mayoría y nosotros no vamos a ir a la pelea, sino hacer lo que nos corresponde hacer que es lógicamente buscar la seguridad de nuestros asociados y si la Inspección del Trabajo que está fiscalizando y no me diga que las condiciones están dadas, nosotros no vamos a ingresar y, en este caso, hemos recibido el apoyo de la empresa que nos dice que no nos enfrentemos con ellos, que no nos expongamos, pero la gente se está cansando y cuando se cansa a lo mejor no nos vamos a enfrentar y vamos a entrar a trabajar. Nuestra gente si quiere entrar a trabajar con enfrentamiento o sin enfrentamiento”, expresó.
Por último el presidente de Sitramcen se quejó de las pocas acciones llevadas a cabo por las autoridades locales para zanjar la disputa, las cuales han quedado -a su juicio- solo en manos de la Inspección del Trabajo y de la voluntad del subsecretario del Trabajo, Francisco Díaz, quien ha actuado de forma conciliatoria.
