Por Redacción PortalPortuario.cl
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La temporada alta del transporte marítimo (agosto a octubre) será especialmente compleja para los importadores por el exceso de demanda, los problema de capacidad y el alza de las tarifas, aseguró IContainers en su último reporte.
Al respecto, aconsejaron a los importadores el tomar en consideración ciertos factores para minimizar el impacto y mantener expectativas realistas sobre la eficiencia de la cadena logística en este periodo.
En ese sentido, recuerdan tener en cuenta las alzas previas provocadas por el precio de los combustibles y las subidas de las tarifas que llegan en esta época bajo la etiqueta GRI (General Rate Increase) o PSS (peak season surcharge o recargo de temporada alta).
“El PSS, al tener un periodo definido de aplicación, parece más fácilmente justificable, pero obliga a reducir las tarifas de nuevo una vez que la temporada alta llega a su fin. Con el GRI, sin embargo, las subidas pueden llegar a prolongarse mucho más en el tiempo, lo que a priori parece ideal para las navieras.”, indica Klaus Lysdal, vicepresidente de operaciones de iContainers.
A esto se le suma, para quienes importan desde Norteamérica, la escasez de camioneros en Estados Unidos, ya que aun genera problemas de disponibilidad y congestión, los que se acrecientan en la temporada alta.
A juicio de Lysdal, “los transportistas se han acostumbrado a las nuevas circunstancias y cada vez son más eficientes trabajando y planificando de acuerdo con las nuevas regulaciones, pero todavía son demasiadas las variables que pueden interferir en el sistema y provocar congestiones.”
Sin embargo, quienes se verán más complicados para asegurar espacios de carga serán los importadores minoristas y eventuales.
Lysdal indica que el principal problema al que se enfrentan estos es la falta de interés de las navieras por adquirir nuevos clientes durante las temporadas de mayor demanda.
“No se mira la potencialidad que pueda tener el cliente en el futuro, sino el beneficio instantáneo, por lo que trabajan con aquellos expedidores que pueden comprometerse con contratos a largo plazo y altos volúmenes de carga o con aquellos que están dispuestos a pagar tarifas mucho más altas de lo habitual.”
Ante este escenario, IContainers concluyó que lo más recomendable para los importadores es planificar con antelación, entender claramente las condiciones de los contratos y tener todas las documentaciones listas con el fin de evitar retrasos innecesarios en Aduanas.