Por Andrés Orrego Siebert
@PortalPortuario
Como laborioso, pero también gratificante ha sido, según el gerente comercial de Puerto Caldera, Christopher Aliste, convertir al recinto de Punta Caleta en un terminal marítimo multipropósito.
El trabajo, que se inició en en el 1992 cuando la Empresa Puerto Caldera inició la operación del Terminal Amarcal Punta Caleta, sigue avanzando para convertirse en 2021 en la plataforma logística-portuaria de la Región de Atacama y, al mismo tiempo, dar salida al Asia-Pacífico de las provincias argentinas vecinas.
¿Cómo ha sido el proceso de convertirse en Terminal Multipropósito?
Ha sido un proceso laborioso, de muchos trámites frente a los organismos gubernamentales para habilitarnos como terminal multipropósito. Pero también ha sido un proceso de satisfacciones, por la generación de redes que hemos desarrollado y el posicionamiento del terminal para que los exportadores e importadores lo perciban como una alternativa concreta para el comercio exterior de la Región de Atacama.
¿Qué cambios se han evidenciado en el terminal?
El cambio más notorio es la actividad permanente del terminal, pasando de operar los meses de diciembre y enero con los embarques de fruta, a operar todos los meses del año con embarques de cobre y otros productos.
¿Cómo se consiguió lo que usted menciona?
Lo anterior gracias al acuerdo comercial con la naviera Hapag Lloyd, que nos permite realizar un servicio naviero regular para la exportación e importación de cargas en contenedores.
¿Cómo se han adaptado para operar con una naviera como Hapag-Lloyd?
La mayor actividad portuaria ha sido acompañada por la mejora de las instalaciones y mayor demanda de bienes y servicios locales. Es así, como este año se han repavimentado 10.000 mt2 de superficie operacional del Terminal, se desarrollaron nuevas áreas de servicios y se tomaron en arriendo a BBNN 12 hectáreas de terrenos con el fin de apoyar la actividad portuaria.
¿Qué equipos y tecnologías se han incorporado?
En conjunto con nuestro operador logístico, se han traído grúas portacontenedores, grúas horquillas de alto tonelaje y todos los implementos para entregar los servicios demandados por la industria minera y las naves portacontenedores. Paralelamente, se ha incorporado un sistema de control de cargas y gestión operacional del Terminal con transmisión de datos electrónicos, que permite el intercambio estandarizado de información y documentos tanto con la Aduana de Chile como con las navieras que operan en el terminal.
¿Qué significa para importadores y exportadores de la Región de Atacama contar con este terminal?
Les da una puerta de entrada y salida del comercio exterior cercana a sus centros productivos, que se traduce en ahorros de tiempo y costo en su cadena logística. También aseguran continuidad operacional al contar con un Terminal dedicado a sus cargas y con múltiples ventajas naturales, como son la baja tasa de cierres de puerto por marejadas y el calado profundo de la bahía de Caldera.
¿Cómo ha sido la relación con la comunidad a propósito del cambio?
Es válido también señalar, lo gratificante que sido el apoyo que hemos recibido de las autoridades locales, quienes han demostrado su interés en que desarrollemos la actividad, pues con ello estamos abriendo una puerta a la generación de empleos en la zona.
¿Cuánta carga se proyecta movilizar al cierre de este año?
El año 2017, movilizamos el Terminal Marítimo Puerto Caldera cerca de 27.000 toneladas de fruta, que representó el 100% de la actividad portuaria de ese año. Para el 2018, se espera duplicar esta cantidad, llegando a 50.000 toneladas entre la fruta y los embarques de cobre que recién comenzaron en agosto.
La visión de su empresa es convertirse en la plataforma logística portuaria de Atacama al 2021 ¿Cómo se perfila ese escenario en materia de transferencia de carga?
En los siguientes años, esperamos un crecimiento exponencial de las transferencias de este terminal, dada la mayor actividad minera de cobre, hierro y litio que se proyecta en la región, sumado a la posibilidad de utilizar este terminal para las exportaciones de los productos de las provincias argentinas vecinas, como por ejemplo Catamarca, La Rioja, Tucumán y Santiago del Estero, las que llegarían a través del paso fronterizo San Francisco, ubicado en la misma Región de Atacama.
¿Cómo evalúa el antes y después del puerto desde que comenzaron a mover contenedores?
Como señalé anteriormente, podríamos decir que ha sido de un desarrollo constante, lo que ha ido abriendo las puertas a más y nuevos proyectos. Es importante señalar que la mayor actividad por transferencias de contenedores ha abierto, a su vez, un canal logístico que no estaba explotado en la zona, generando múltiples alternativas para el comercio exterior de la Región de Atacama.
