Por Andrés Orrego Siebert
@PortalPortuario
El gerente general de Asexma Bio Bio e integrante de la Mesa Comex de la misma Región, Alfredo Meneses, advirtió que la escasez de contenedores, puntualmente, refrigerados está afectando a los exportadores de la zona, donde -además y por el mismo motivo- se han evidenciado una serie de cancelaciones de recaladas. En ese contexto, el dirigente gremial subrayó que esta crisis podría haberse resuelto de permanecer abierta la planta de Maersk Container Industry (MCIS) en San Antonio.
“La reactivación de China ha hecho que los conenedores vacíos hayan vuelto a este gigante, generando un desequilibrio en el mercado global, especialmente, en el mercado alimentario y es ahí donde se ha hecho sentir bastante más, sobre todo, en zonas como la nuestra que se requiere del reefer para poder transferir las cargas. Sin lugar a dudas, este ha sido otro efecto negativo que ha afectado a la Región del Bio Bio y que, la verdad, muy pocos se atreven a proyectar su punto de salida, porque no queda más que esperar que esos contenedores salgan de China y vuelvan al resto del mundo”, señaló.
“Creo que el cierre de la planta de Maersk en San Antonio ha sido uno de los grandes desaciertos que hemos tenido como país, porque imaginemos lo que hubiera significado tener esa cabeza de playa fabricando contenedores en Chile, no solo para el país, sino para toda la costa oeste. Efectivamente hubiera generado todo un efecto positivo a este lado del mundo, más aún, en estos tiempos de pandemia, pero -lamentablemente- por miopía y por, a veces, miradas extraordinariamente cortas perdimos la posibilidad de mantener esas instalaciones. Esto, que no ha sido lo suficientemente señalado como una de las grandes pérdidas que hemos tenido, hoy gracias a esta externalidad negativa del déficit de contenedores en el mundo, nos pasa la cuenta como país”, remarcó.
Meneses insistió en que en el cierre de la planta de MCIS falló la institucionalidad pública, pero también el sector privado, incluyendo a los sindicatos.
“Esta era una gran oportunidad, no solo para abastecer al mercado de contenedores, sino también para impulsar otras industrias en Chile como la metalmecánica dado que para fabricar contenedores se requieren muchas piezas. Los beneficios eran muchos, así que hoy -en medio de esta pandemia- no podemos olvidar la pérdida que significó el cierre de esta fábrica y que, además, nos muestra que como país nos hemos ido quedando atrás en el objetivo de ser una plataforma del comercio mundial. Aquí falló la institucionalidad pública y el sector privado, fallamos todos”, lamentó.