Por Redacción PortalPortuario.cl

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La Asociación de Armadores de Noruega cree que “las directrices  de las autoridades noruegas y europeas son cruciales sobre cómo la comunidad empresarial debe relacionarse con los bienes no sancionados de Rusia”, aunque advierten que se necesitan mayores regulaciones debido a la existencia de contratos que obligan a empresas a mantener el transporte de carga hacia el país dirigido por Vladimir Putin.

El CEO de los armadores noruegos, Harald Solberg, explica que “por parte de la Asociación de Armadores de Noruega, somos plenamente conscientes de que la guerra de Rusia contra Ucrania es una grave violación del derecho internacional y del orden jurídico internacional que el mundo exterior no puede aceptar. Por lo tanto, la Asociación de Armadores de Noruega y nuestros miembros apoyan las estrictas sanciones contra Rusia y esperan que contribuyan a un final más rápido de la guerra”.

Soldberg añadió que “como industria internacional, nos relacionamos con las sanciones de los EE.UU., la UE y el Reino Unido, y naturalmente también Noruega. Un desafío importante con las sanciones actuales es que el petróleo y los productos derivados del petróleo son actualmente un producto legal en el comercio entre Rusia y la UE, mientras que EE.UU., Gran Bretaña y Canadá lo sancionan. Esto parece ser una escapatoria en las sanciones de la UE y es particularmente desafiante ya que los ingresos del petróleo constituyen el flujo de efectivo más importante para la guerra del régimen de Putin”.

El ejecutivo indicó también que “seguimos de cerca el debate sobre la sanción del petróleo y el gas rusos en la UE. No hay duda de que las sanciones sobre el petróleo y el gas rusos también afectarán a Europa. Los precios de la energía, que ya son récord, serán más altos y las consecuencias para los europeos de a pie y las empresas europeas serán importantes. Hasta ahora, por lo tanto, la UE, y por lo tanto Noruega, no ha querido sancionar el petróleo y el gas rusos”.

Sin embargo, muchas compañías navieras han decidido no llevar nuevos cargamentos hacia o desde Rusia como resultado de las graves violaciones del derecho internacional por parte del país. Además, varias compañías navieras han pedido a sus clientes que asuman la responsabilidad moral en esta grave situación evitando el envío de mercancías hacia o desde Rusia.

Solberg finalizó diciendo que “para detener el flujo de efectivo más importante para la guerra del régimen de Putin, la UE y las autoridades noruegas deben tomar una posición clara sobre las sanciones a los cargamentos de petróleo de Rusia. O este tipo de envío es necesario, legal y aceptado, o se deben determinar las sanciones impuestas por el gobierno. Esto no se puede dejar en manos de un sistema voluntario de sanciones basado en la empresa”.

La asociación sostiene que algunas compañías navieras están obligadas por acuerdos celebrados antes de que estallara la guerra. Si ha alquilado el barco por un período más largo a un cliente que decide tanto la carga como el patrón de navegación, no hay forma de salir de ese contrato, si el estímulo moral no ayuda y la carga no está sancionada. Esto se aplica no solo a las compañías navieras noruegas, sino también a todas las demás compañías navieras europeas.