La Autoridad Australiana de Seguridad Marítima (Amsa) ha prohibido por un año la navegación en aguas australianas al granelero Msxt Emily, registrado en Liberia, debido a denuncias por maltrato a marineros a bordo y robo de salarios.

Esta decisión se llevó a cabo luego de un aviso de la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF), posteriormente, Amsa realizó una inspección en el buque mientras estaba atracado en el Puerto de Hay Point, en Queensland. Durante la revisión, la autoridad australiana descubrió múltiples infracciones del Convenio sobre el Trabajo Marítimo de 2006.

Según detalló FleetMoon, la investigación de Amsa reveló que la tripulación del buque no había recibido la compensación adecuada tras sus acuerdos de empleo. Además, habían pruebas de que algunos contratos de trabajo llevaban firmas falsificadas de los marinos, mientras que en otros casos se había coaccionado a los trabajadores para que firmaran esos acuerdos.

La inspección detalló que habían salarios impagados por un total de más de 77 mil dólares para los trabajadores del barco.

También, Amsa señaló que el operador del navío, MSM Ship Management Pte, intentó liquidar los salarios pendientes de los marineros previo a la investigación.

Stephen McMeeking, director de inspecciones de buques de Amsa, señaló que “las condiciones a bordo como espantosas, con marinos que carecían de acceso a la atención médica esencial y que tenían que cubrir los costes de sus comidas. La tripulación estaba compuesta por personas procedentes de China, Myanmar y Vietnam, y los marinos no chinos debían pagar un suplemento por alimentos culturalmente apropiados”.

Asimismo, McMeeking aseguró que los marinos serían debidamente compensados por sus salarios impagados, y que el operador del buque sería sometido a un control vigilante para evitar que se repitieran incidentes de este tipo.