El fabricante de automóviles alemán BMW importó, al menos, 8.000 vehículos Mini Cooper a Estados Unidos con componentes electrónicos de un proveedor chino prohibido, según un informe del Senado estadounidense.

Un informe del personal del presidente del Comité de Finanzas del Senado, Ron Wyden, dio cuenta que BMW importó los vehículos con piezas de un proveedor chino vetadas según una Ley de 2021 y que la marca alemana continuó ingresando productos con las piezas vetadas hasta al menos abril.

BMW Group dijo en un correo electrónico que había “tomado medidas para detener la importación de los productos afectados”. La empresa llevará a cabo una acción de servicio para reemplazar las piezas específicas y agregó que “tiene estándares y políticas estrictas en materia de prácticas laborales, derechos humanos y condiciones laborales, que todos nuestros proveedores directos deben seguir”.

En 2021, el Congreso aprobó la Ley de Prevención del Trabajo Forzoso Uigur (UFLPA) para fortalecer la aplicación de las leyes destinadas a impedir la importación de bienes de la región china de Xinjiang, la que se cree que fueron producidos con trabajo forzoso por miembros del grupo minoritario uigur del país. China niega las acusaciones.

“La autocontrol de los fabricantes de automóviles claramente no está funcionando”, dijo Wyden, instando a la agencia de Aduanas y Protección Fronteriza a “tomar una serie de medidas específicas para reforzar la aplicación de la ley y tomar medidas enérgicas contra las empresas que fomentan el uso vergonzoso del trabajo forzoso en China”.

El informe encontró que Bourns Inc, un proveedor de automóviles con sede en California, había adquirido componentes de Sichuan Jingweida Technology Group (JWD). Esa empresa china fue agregada a la Lista de Entidades de la UFLPA en diciembre, lo que significa que se presume que sus productos están fabricados con trabajo forzado.

Bourns proporcionó piezas de JWD a Lear Corp, proveedor directo de BMW, Jaguar–Land Rover. Bourns notificó a Lear en enero que los componentes electrónicos conocidos como transformadores LAN habían sido producidos por JWD y estaban prohibidos en los vehículos importados de Estados Unidos.

El 11 de enero, Lear envió cartas a BMW, Jaguar-Land Rover, Volvo y Volkswagen AG informándoles sobre los componentes prohibidos, según el informe. Lear confirmó que notificó rápidamente a los clientes “sobre los productos que contienen estos componentes y trabajó con nuestro proveedor para reabastecer rápidamente la fabricación de estos componentes a otro subproveedor”.

Jaguar-Land Rover

El informe dice que Jaguar Land Rover importó repuestos con componentes JWD después de diciembre, y agrega que el fabricante de automóviles puso en cuarentena todo el inventario existente que contenía el componente JWD a nivel mundial para su destrucción.

Jaguar-Land Rover dijo que tan pronto como se enteró del problema, “detuvo inmediatamente todos los envíos de las dos piezas de servicio posventa afectadas”. La empresa añadió que “se toma en serio las cuestiones de derechos humanos y trabajo forzoso y tiene un programa activo y continuo de protección de los derechos humanos y medidas contra la esclavitud”.

El informe dice que BMW “parece haber detenido (las importaciones) sólo después de que el comité hizo repetidamente preguntas detalladas a Lear y a los clientes OEM de Lear, incluido BMW, sobre su relación con JWD”.

Lear dijo que toma en serio las cuestiones planteadas y comparte “el deseo del comité de combatir el trabajo forzoso” y señaló que no tiene una relación directa con JWD.

En febrero, Volkswagen confirmó que varios miles de vehículos Porsche, Bentley y Audi fueron retenidos en puertos estadounidenses porque un subcomponente chino violó las leyes contra el trabajo forzoso.

El informe del Senado dijo que los vehículos Volkswagen contenían piezas electrónicas JWD y que el fabricante de automóviles reveló voluntariamente el problema a Aduanas y Protección Fronteriza.

VW dijo recientemente que desde entonces ha reemplazado las piezas de todos los vehículos retenidos en los puertos estadounidenses y “toma muy en serio las acusaciones de violaciones de derechos humanos y está comprometido a prevenir el uso de trabajo forzoso en nuestra cadena de suministro”.

Volvo Cars recibió transformadores LAN para un nuevo programa de automóviles que aún no está en producción y no utilizó ninguno en sus vehículos, agrega el informe.