Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters
La cantidad de petróleo ruso e iraní almacenado en buques ha alcanzado máximos de varios meses debido a que las sanciones más severas de Estados Unidos redujeron el número de compradores, dejando menos petroleros disponibles para entregar cargamentos y elevando los costos del crudo, según dijeron fuentes comerciales y analistas.
Washington ha impuesto múltiples rondas de penalizaciones a navíos y entidades que transportan carburante de Irán y Rusia, lo que ha interrumpido el comercio con los principales importadores, China e India.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, restableció la semana pasada su campaña de “máxima presión” sobre Irán, que incluye esfuerzos para reducir a cero sus exportaciones de petróleo para evitar que Teherán obtenga un arma nuclear.
El productor de la OPEP ha tenido dificultades para atraer nuevos buques para llenar el déficit de capacidad de transporte desde que se impusieron las sanciones en el cuarto trimestre, según dio cuenta Xu Muyu, analista senior de la firma de análisis de datos Kpler.
La prohibición impuesta el mes pasado por el Grupo Portuario de Shandong de China a los petroleros sancionados de hacer escala en sus puertos de la provincia oriental, donde se encuentran la mayoría de las refinerías independientes que son los principales compradores de petróleo ruso e iraní, también ha dificultado la descarga de dichos cargamentos.
El agente naviero Braemar ACM sostuvo que el 57% de los 126 grandes buques transportadores de crudo (VLCC) actualmente involucrados en el comercio de crudo de Irán a China ya están sujetos a sanciones estadounidenses.
A medida que las exportaciones han aumentado y los envíos a China han disminuido, la cantidad de petróleo iraní en almacenamiento flotante se ha expandido entre 10 y 20 millones de barriles en lo que va del año, según las estimaciones de tres analistas.
Sin embargo, los cálculos del volumen total de petróleo iraní guardado a flote varían ampliamente debido a que los analistas utilizan diferentes metodologías para rastrear la llamada flota sombra
Los datos de Kpler muestran que el almacenamiento flotante de petróleo iraní supera los 25 millones de barriles, el nivel más alto en más de un año, con aproximadamente el 80% de los cargamentos a la gira en las aguas de Singapur y Malasia.
Por el contrario, Emma Li, analista senior del rastreador de buques tanque Vortexa Analytics, estima que la cantidad de crudo y condensado iraní en almacenamiento flotante se situó en 73,1 millones de barriles a fines de enero.
Las exportaciones de Irán aumentaron por segundo mes a 1,78 millones de barriles en enero después de alcanzar un mínimo de dos años de 1,45 millones en noviembre, de acuerdo a lo indicado por Li.
“Las técnicas de contrabando, como la desactivación y falsificación de transpondedores AIS y la realización de transferencias de barco a barco, significan que puede haber incluso más petróleo iraní empezando a flotar”, señaló Richard Bronze, director de geopolítica de la consultora Energy Aspects.
Con menos barcos no autorizados para entregar petróleo a China, los precios del crudo han subido, mientras que los descuentos para el crudo ligero iraní insignia se han reducido a 50 centavos por barril frente al ICE Brent, un máximo de varios años, frente a los descuentos de 2,50 dólares por barril de hace unos dos meses, sobre la base de entrega ex-barco (DES) a la provincia de Shandong para un cargamento que llegaba en marzo, dijeron los comerciantes.
Rusia
En el caso del petróleo ruso, las sanciones más duras impuestas hace un mes por la administración saliente de Biden han elevado los costos para las refinerías en China e India, y el crudo ESPO Blend de marzo se cotizó entre 2 y 3 dólares por encima del ICE Brent sobre una base DES para China, las primas más altas en más de dos años, dijeron tres fuentes comerciales.
Los costos de transporte también se han disparado, con menos buques disponibles. El costo de enviar petróleo desde el Lejano Oriente de Rusia al norte de China rondaba los 4,5 millones de dólares, aproximadamente el triple de lo que costaba antes de las últimas sanciones estadounidenses, aunque se redujo de los 7 millones de dólares que costaba poco después de que se anunciaran.
El crudo ruso en agua alcanzó un máximo de dos meses de 88 millones de barriles el 27 de enero, un 24% más que el 10 de enero, cuando se anunciaron las sanciones, mostraron los datos de Kpler.
“El volumen ha disminuido desde finales de enero debido a que las exportaciones de crudo ruso cayeron, mientras que algunos cargamentos se han descargado”, explayó Xu de Kpler.
“Además, varios barcos que anteriormente se dedicaban al transporte de petróleo iraní están cambiando al comercio ruso”, concluyó.