El ministro de Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz, suscribió hoy a nombre de Chile el Acuerdo Transpacífico (conocido como TPP por sus siglas en inglés), en una ceremonia realizada en Auckland, Nueva Zelanda y que contó con la participación de altas autoridades de los otros once países miembros de dicho tratado.
“Este acuerdo representa al 40% del PIB mundial, un tercio de todo el comercio y unos 800 millones de consumidores”, destacó el Canciller, junto con agregar que significará más empleos y prosperidad para los chilenos y chilenas.
“Este es un acuerdo balanceado, que traerá más progreso, más empleo. Hemos salvaguardado las áreas sensibles en la negociación”, afirmó.
El Secretario de Estado enfatizó que durante la negociación, Chile logró resguardar adecuadamente los temas más sensibles para el país. “Este acuerdo no es lo que se discutía cuando empezó esta negociación. Hemos protegido nuestros intereses. A veces lo hemos hecho en coordinación con otros países que se oponían a algunas de las solicitudes que estaban incluidas hace dos o tres años y que eran absolutamente inaceptables para Chile y para otros países. Así, lo que se ha firmado hoy no es lo que se discutía en esos años”.
Por su parte, el director de la DIRECON, Andrés Rebolledo destacó que aunque Chile ya tiene acuerdos con todos los miembros del TPP, no todos presentan el mismo grado de profundidad. “Por lo tanto sus disposiciones abrirán oportunidades para que nuestro comercio siga creciendo y diversificando su oferta exportadora”, dijo.
En esa línea, este tratado permitirá terminar con exclusiones que afectaban, por ejemplo, al sector agroalimentario chileno.
En materia de acceso a mercados, al menos 1.600 productos de este sector que se encontraban excluidos o en una situación de desventaja dentro de los acuerdos bilaterales, con el TPP tendrán algún tipo de preferencia arancelaria, en particular en mercados que para Chile han sido tradicionalmente más complejos, como Japón, Malasia, Vietnam y Canadá, entre otros.
El TPP también ofrecerá la posibilidad de acumular origen, lo cual facilitará una mayor participación de Chile en las cadenas de valor de los demás miembros de TPP.
En efecto, una vez que entre en vigencia el acuerdo, los productores nacionales podrán importar insumos originarios de los demás miembros de TPP para elaborar sus productos, y a su vez, con esos bienes elaborados por ellos abastecer a los demás países miembros.
El acuerdo también involucra una estandarización en procedimientos aduaneros y facilitación de comercio, lo que permitirán reducir costos y facilitar el comercio en general, además de estándares más altos en materias sanitarias y fitosanitarias y un capítulo de telecomunicaciones que busca asegurar el desarrollo competitivo del sector, con normas de roaming y portabilidad, entre otras materias importantes.
Adicionalmente, el TPP incluye un capítulo sobre las pymes, lo cual coincide plenamente con uno de los objetivos del gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet en materia de comercio exterior, que es ampliar el número de pequeñas y medianas empresas chilenas exportadoras.
Para ello se contempla el intercambio de información general y técnica en diversos temas como reglas de origen y aranceles, tomando en cuenta que muchas veces las pymes no cuentan con las herramientas o la experiencia necesaria para aprovechar las oportunidades que presentan este tipo de tratados.
A partir de la firma del acuerdo, los doce países iniciarán ahora los procesos internos para su aprobación en los respectivos congresos, para lo cual tendrán dos años de plazo. En la eventualidad de que esto no se cumpla, el tratado entraría en vigencia cuando esté aprobado en los países que representen un 85% del PIB total de los doce signatarios.
Con un mercado potencial de 812 millones de personas, el intercambio comercial de Chile con los países TPP bordea los US$ 45.000 millones.
Junto a Chile, son integrantes del TPP, Australia, Brunei, Canadá, Estados Unidos, Malasia, México, Japón, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam.