APM Terminals anunció que la primera etapa del Terminal de Contenedores de Moín en Costa Rica, cuya inversión es de 663 millones de dólares por parte de la compñía, avanza sin contratiempos. La concesión es una de las más ambiciosas en dicho país centroamericano y deberá estar listo en 36 meses a contar de enero pasado.
Pese a la oposición del Sindicato de Trabajadores de Japdeva, APM Terminals ha informado que todo avanza según el cronograma. De hecho, el contratista Van Oord and BAM ya empezó a levantar sus campamentos en Moín, Limón.
Esta empresa holandesa se encargará de la construcción de un rompeolas de 1.500 metros de largo y de darle forma a una isla artificial a 500 metros de las costas limonenses, donde se construirá la TCM.
Dragado listo para iniciar
Según informó El Financiero de Costa Rica, el consorcio, que empleará a 700 trabajadores durante la primera fase del proyecto, también construirá la ruta de acceso desde tierra hasta la isla de 40 hectáreas.
En tanto, el secretario técnico del Consejo Nacional de Concesiones (CNC), Jorge Mora, explicó al diario La Nación que en la primera etapa de construcción del megapuerto principalmente se nota el trabajo de los topógrafos y de los transportistas de materiales que darán forma al muelle.
Una de las primeras tareas que iniciará Van Oord and BAM será el dragado del canal marítimo de acceso a la megaterminal.
Paul Gallie, director general de APM Terminals para Centroamérica, afirmó que el proceso de dragado del canal de acceso a la TCM se iniciará esta semana.
Gallie añadió que está por llegar al país la primera de las dragas que dará profundidad al canal de acceso. La maquinaria proviene de México.
La profundidad del canal será de 16 metros y permitirá el ingreso de buques portacontenedores de la categoría panamax capaces de transportar desde 4.500 hasta 7.500 TEU (aproximadamente 8.500 contenedores) y en futuras fases de expansión la TCM podrá dar servicio a barcos de hasta 13.000 TEU.
Los actuales muelles, operados por la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva), cargaron y descargaron 1,05 millones de TEU durante el 2013 y tienen capacidad para atender buques de hasta 2.500 TEU.
El material que se extraiga durante el proceso de dragado se utilizará para construir la isla artificial donde se desarrollará la TCM, que tendrá 1.500 metros de longitud de atraque, divididos en cinco puestos con seis grúas pórticas post panamax.
Gallie aseguró que el inicio de la primera etapa de construcción de la TCM estuvo precedido por más de 100 perforaciones del lecho marino que dan certeza sobre el terreno en que se desarrollará el proyecto.
En cuanto a la paralización de la extracción de material rocoso del Tajo Asunción, ubicado en Limón, a raíz de investigaciones por presunto daño ambiental, Gallie dijo que el hecho no ha perjudicado el avance de las obras.
El director agregó que Van Oord extrae material de otros cinco tajos, sin que el transporte de los insumos desde otras zonas implique un aumento en los costos.
Esos materiales se transportan a través de la ruta 257, un camino de lastre de 2,8 kilómetros de largo que comunica la TCM con la ruta 32.
El costo total de este megapuerto alcanza 1.000 millones de dólares y deberá concluirse, de acuerdo al contrato, en enero de 2018.