Por Redacción PortalPortuario.cl

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En el marco de una serie de proyectos para el primer trimestre de 2023, la División de Depósitos y Contenedores de D&C Group busca implementar una iniciativa de automatización de los gates en el depósito de San Antonio, una prueba que luego se intentará replicar en otros polos de la compañía.

Asimismo, se proyecta continuar con un piloto que apunta a aumentar la trazabilidad en la información operacional, el que actualmente se encuentra habilitando en el depósito de Valparaíso. En ambas infraestructuras de la Región de Valparaíso existen proyectos de optimización y crecimiento en espera, los que conducirían a aumentar la capacidad de los depósitos en, al menos, 25%.

A la vez, en 2023 se explorará el “generar polos para demandas específicas, es decir, instalar capacidad en lugares donde no la hay o incorporándonos de manera competitiva a polos en desarrollo, convencidos de que podemos ser solución a desafíos logísticos particulares en una determinada zona”, según indicó el gerente general de D&C Group, Marcelo Hozven.

En línea con lo tratado, el nuevo Terminal Multimodal de Talcahuano -en construcción- permitirá (durante el 2023) mejorar su acceso al puerto, agregar conexión ferroviaria e integrar los servicios de logística y depósito.

Lo anterior va de la mano de la inversión, que en 2022 concretó 1,3 millones de euros en nuevo equipamiento como grúas portacontenedores. A ello se suman inversiones en tecnología, seguridad, capacitación y mejoras operativas en varios de los recintos.

“Las inversiones se van estudiando y planificando acorde a las condiciones de mercado. Estamos en un periodo de alta incertidumbre, pero eso nos hace priorizar según nuestras necesidades operacionales. Hemos sido agresivos, en ciertos aspectos, pero con capacidad de priorizar a la espera de los momentos adecuados para hacerlo. Lo importante es que tenemos la visión de donde queremos llegar y de cómo ir creciendo”, resumió el gerente general.

2022

Desde D&C Group se indicó que se concretaron movimientos cercanos a cifras récord durante el primer semestre de 2022, escenario que no se repitió en la segunda mitad del año.

En este sentido, Hozven explicó que el ciclo post pandemia aún presenta escenarios variables a los que la industria en general, y el grupo en particular, han ido aprendiendo a adaptarse.

“En cifras termina bien para nosotros, es un buen año. El primer semestre tuvo un movimiento fuera de pronóstico. El segundo tuvo una baja considerable, pero eso ocurrió en la cadena logística completa”, señaló.

A su juicio, tras el estancamiento inicial de la pandemia en 2020 y luego un ciclo de alta demanda en 2021, la actividad continúa en reacomodo. “Después de haberse quedado pasmada, la logística ha probado ser resiliente; ha sido capaz de salir adelante, aunque con problemas y atoches en varios lugares”, detalló.

En base a proyecciones realizadas por Hozven, el periodo actual asoma marcado por la posibilidad de una recesión global, que en Chile tendría un foco “importante” de baja económica. “Nadie puede decir con exactitud qué va a pasar en 2023. Viene mucha incertidumbre. Ante estos escenarios que estamos continuamente analizando, hoy estamos viendo cómo vamos a administrar nuestros recursos para atender a nuestros clientes de cara a estos nuevos desafíos”, apuntó.

Finalmente, Hozven comentó que los pilares del plan estratégico del grupo trazan el camino que viene. “Un pilar es la innovación, apuntar a tener procesos cada vez más automatizados. Hoy debemos ser más flexibles ante los cambios del entorno; la pandemia nos enseñó en aquello, a adaptarnos más rápidamente, y que eso se obtiene con una mayor base tecnológica”, concluyó.