Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters
@PortalPortuario
La isla caribeña de Bonaire dio cuenta que el derrame originado desde una barcaza petrolera hundida cerca de la vecina Trinidad y Tobago había llegado a sus costas.
La situación representaría una “seria amenaza tanto para los humanos como para la naturaleza”, según indicaron las autoridades, quienes movilizaron servicios de emergencia a los lugares afectados.
Algunas partes de la costa este de Bonaire, incluidas Sorobon, Lac y Lagun, han sido contaminadas con petróleo y los ecosistemas vulnerables de manglares, peces y corales están en riesgo, según remarcó el gobierno por medio de un comunicado.
En tanto, las publicaciones en redes sociales de los residentes y una estación de radio mostraban imágenes de arena, arrecifes y aves manchadas el carburante negro en algunas playas.
“Los servicios de emergencia están ahora comprometidos a una limpieza rápida y eficaz de las mareas negras”, comunicó el informativo difundido por las autoridades locales.
Bonaire, que depende del turismo, no ha declarado el estado de emergencia, pero ha aconsejado a los visitantes que eviten los lugares contaminados. No hubo información inmediata sobre el tamaño de las manchas que habían llegado a la costa este de Bonaire.
Los medios locales citaron a funcionarios diciendo que proteger el área rica en manglares de Lac Bay se ha convertido en una prioridad.
El derrame de petróleo de una barcaza volcada fue detectado por primera vez por la Guardia Costera de Trinidad y Tobago el 7 de febrero y todavía hay fugas del combustible, según las autoridades. Ha ennegrecido la costa de Tobago y también amenaza con llegar a Granada.
Cabe recordar que incidente similar ocurrió en 2017. El carburante residual de un tanque de almacenamiento en una refinería operada por la compañía estatal de Trinidad y Tobago, Petrotrin, se filtró, derramando alrededor de 20.000 galones y alcanzando las islas de Los Roques y la Isla de Aves en Venezuela.