En un mes, los 750 trabajadores eventuales del Puerto de Valparaíso, aglutinados en el Sindicato de Estibadores, serán partícipes de una contienda electoral que podría ser “histórica”. Roberto Rojas, de 61 años, defenderá la presidencia del organismo frente a Pablo Klimpel (32), quien ha conformado una disidencia denominada “Portuarios Unidos Valparaíso” (PUV), que cuenta con el apoyo de la Unión Portuaria de Chile.
En el contexto de este proceso, las listas comienzan a mostrar una marcada diferencia. Por una parte, “la disidencia” busca reformar la estructura del sindicato a objeto de establecer una nueva relación entre los miembros de la organización, así como con las empresas del sector y, por otro lado, la actual cabeza de los estibadores propone seguir profundizando el modelo de gestión que ha permitido a Valparaíso contar estabilidad laboral y paz social.
“Nosotros nos denominamos ‘Portuarios Unidos Valparaíso’ y somos una tendencia sindical dentro del sindicato de estibadores y trabajamos en conjunto con el Sindicato de Contratados de Opval, ya que tenemos problemáticas comunes dentro del terminal (T2). Como propuesta tenemos la reforma a la estructura de funcionamiento del sindicato con la incorporación más activa de las bases del sindicato, porque tenemos la estructura clásica que es el directorio, las comisiones y la asamblea, pero queremos agregar los delegados de faena para que cada uno de los sectores pueda llevar los problemas de su sección a una instancia directiva del sindicato”, comentó Klimpel -actualmente congelado en términos laborales- a PortalPortuario.cl
“Nosotros tenemos hoy día como proyecto terminar las gestiones que tenemos con la nueva concesionaria OHL o la empresa Opval, donde nosotros nos estamos suscribiendo a un acuerdo marco. Este acuerdo ha sido visado por los abogados nuestros, por los abogados de la empresa con la anuencia de la gerencia y de OHL España y ha sido presentado al Ministerio del Trabajo, siendo enviado a corrección a la Dirección del Trabajo y hoy está a disposición de firmarlo, pero lamentablemente vemos un doble estandar que no sé si tienen los asesores o el Ministerio, porque venimos trabajando ese documento hace más de un año y hoy se nos dice que está congelado por las elecciones en el sindicato”, aseveró también a este medio Roberto Rojas.
Profundizando en las propuestas de PUV, Klimpel afirmó que “nosotros queremos democratización en la toma de decisiones, por otro lado hay propuestas relacionadas a lo que está llevando a cabo la Unión Portuaria de Chile como el trabajo de alto riesgo, el tema previsional, la regulación de la salud laboral, seguridad laboral, la estandarización de las cuadrillas, la definición de trabajador portuario, recinto portuario y trabajo portuario que son cosas que, hoy, son confusas”.
En relación a la supuesta “falta de democracia en el sindicato”, Rojas aseguró que a la mesa que dirige no se le puede acusar de antidemocrática, pero reconoció que existen grupos de trabajadores que pueden no estar conformes con lo que ha realizado su directorio que incluso -dijo- ha defendido a quienes hoy día se le oponen.
“Creo que hay un descontento de un grupo de trabajadores que se sienten, no sé si será discriminados, pero eso lo hemos conversado y para eso estamos trabajando en términos del acuerdo, donde están incorporados los castigados y los disidentes, siendo nosotros opositores a ellos y ellos a nosotros; sin embargo, nosotros decimos que no vamos a marginar a nadie, porque si nosotros quisiéramos marginalos ni siquiera los pondríamos en este listado. Este documento se va a firmar igual después de las elecciones con mi persona o sin mi persona y el objetivo del sindicato es la no discriminación del trabajador en el Puerto de Valparaíso y con esto concretamos con la empresa es que no haya trabajadores discriminados”, señaló el presidente del Sindicato de Estibadores.
Posibilidades
Consultado sobre sus posibilidades de salir electo, sobre todo pensando que ya no ejerce funciones al interior del Terminal 2, Klimpel -con tres años de experiencia portuaria y cinco años de estudios en psicología en la Universidad Arcis de Valparaíso- puso como ejemplo lo ocurrido en Puerto Ventanas, donde el actual presidente de la estiba, Juan Pablo Pizarro, estuvo congelado laboralmente antes de ser elegido y, post elección, fue reintegrado a las faenas.
“Tenemos el caso del presidente del sindicato de eventuales de Puerto Ventanas, tres semanas antes de que fuera elegido presidente del sindicato fue desvinculado, entonces después de que salió elegido presidente y de una pequeña movilización fue reintegrado, es lo único que nos queda”, aseguró.
Ante la misma pregunta, Rojas señaló que “la elección que se viene el 15 de febrero acá en el sindicato tiene un componente muy especial, el primer componente es que el Sindicato de Estibadores de Valparaíso es el más grande del país con 750 trabajadores y con un edificio propio, donde se han implementado políticas de acuerdo con las empresas que ha beneficiado a un grupo importante de trabajadores y que hoy día no solo está en juego, lo que proponen los nuevos postulantes, sino el proyecto del sindicato con las empresas, así como también la estabilidad del Puerto de Valparaíso en términos de la paz social”.
Ni listas negras ni partidos políticos
En el fragor de esta contienda que recién se inicia han surgido acusaciones cruzadas. Los integrantes del llamado PUV han dicho que la mesa de Rojas mantiene “listas negras” y que su labor ha sido pro empresa, lo cual es rechazado por el dirigente que -a su vez- denuncia que sus opositores están financiados por partidos políticos de izquierda. Lo anterior; en tanto, es descartado por Klimpel.