La Empresa Portuaria de Valparaíso (EPV), mediante una declaración pública, manifestó su inquietud por las recientes declaraciones realizadas por su concesionario Terminal Pacífico Sur (TPS) que acusó a la estatal portuaria de “poner en riesgo” la competitividad del puerto.
Al respecto, EPV indicó que “manifestamos nuestra inquietud ante el emplazamiento realizado este viernes por el concesionario del Terminal 1, Terminal Pacífico Sur (TPS), endosando a la Empresa Portuaria responsabilidad en el aumento de costos en las operaciones realizadas en el sistema portuario”.
“Creemos oportuno indicar a TPS, que conforme a la legislación chilena, la condición de Autoridad Portuaria del sistema portuario de Valparaíso recae en la Empresa Portuaria Valparaíso y no en los operadores de sus terminales. Por lo tanto, como el concesionario ha decidido judicializar este tema, serán los tribunales quienes resolverán y, en ese escenario, sólo resta esperar que las partes involucradas acaten el dictamen de la justicia”, agrega la declaración pública de la estatal.
EPV añade, además, en su escrito que no ha dejado de poner atención a los costos de la cadena logística, buscando mantener la eficiencia y competitividad del sistema portuario.
“Como empresa portuaria hemos estado siempre preocupados por los costos de nuestra cadena logística, procurando cuidar las principales cualidades del sistema portuario de Valparaíso, que son su eficiencia y alta competitividad. Que el modelo logístico permitiera a TPS movilizar en la actualidad 3 millones de toneladas adicionales a las que proyectaba al inicio de su concesión, ha permitido mejorar la competitividad del puerto y brindar beneficios a todos los actores de la cadena logística. Por eso resulta extraño que, siete años después de que entró en operación este modelo, incorporando la Zeal y el Acceso Sur, recién el concesionario reclame porque las inspecciones se realizan fuera de los terminales”, afirma la EPV.
La Empresa Portuaria de Valparaíso prosigue indicando que “la competitividad no sólo debe analizarse desde la transferencia de cargas de importación. Desde el concepto de cargas de exportación, Valparaíso hoy en la actualidad es una plaza importantísima, por ejemplo, para la salida de más del 50% de la fruta chilena hacia los mercados internacionales”.
“Esa responsabilidad presupone que los terminales, y en particular TPS, debieran fomentar que la fiscalización no se haga al interior de éstos, ya que el hallazgo de una plaga cuarentenaria podría afectar a la totalidad del puerto y dejarlo inoperativo por mucho tiempo, amenaza que casi se concretó hace unos años cuando se detectó un ejemplar de la mosca de la fruta en un cerro de Valparaíso. Eso sería caótico para los exportadores y quienes trabajan en la actividad”, subraya la estatal.
Por otro lado, EPV indica que “tenemos la plena voluntad de avanzar en la mejora continua de los procesos en el puerto. Estamos abiertos y disponibles, como saben los actores del sistema logístico portuario con quienes mes a mes nos reunimos en Folovap, a discutir, revisar y mejorar los procedimientos y costos de la cadena logística, que no sólo están asociados a los servicios del transporte, sino también a la labor que se hace al interior de los propios terminales”.
“Reiteramos que nos asiste la convicción de que no procede modificar los actuales procedimientos operativos del sistema portuario, a causa de intereses económicos. El SAG y los fiscalizadores de la Aduana han indicado que es en Zeal donde están las condiciones adecuadas para realizar las labores de aforo de las mercancías, y no en los terminales”, concluye la nota.
