La mayor naviera de Corea del Sur, Hanjin Shipping, cuya quiebra alteró en septiembre el tráfico internacional de mercancías, ha anunciado este lunes que ha solicitado permiso a los tribunales para vender sus operaciones en Europa, un paso más hacia su posible liquidación.
La séptima compañía de transporte marítimo del mundo ha tomado la decisión de cerrar sus 10 operaciones en Europa, incluida su sede regional en Alemania, “en línea con su plan de recuperación (financiera) en curso”, explicó a Efe una portavoz, sin ofrecer más detalles.
La empresa pidió la autorización al Tribunal del Distrito Central de Seúl con el fin de comenzar el proceso esta misma semana.
Hanjin Shipping, actualmente bajo administración judicial y con la necesidad de recuperar liquidez y pagar deudas, ya puso a la venta a mediados de mes su ruta entre Asia y Estados Unidos, incluidos barcos y personal, en una licitación que debería resolverse a principios de noviembre.
Además, anunció que vendería su participación en una filial estadounidense que opera en el puerto de Long Beach (California) y prescindirá de más de la mitad de sus aproximadamente 650 empleados en tierra.
La naviera se declaró en quiebra el 31 de agosto y prácticamente todos los puertos del mundo le negaron el acceso al no poder pagar las tasas, lo que alteró gravemente el tráfico de mercancías por mar durante varias semanas.
En septiembre, Hanjin recibió unos 79 millones de euros del Grupo Hanjin y su empresa matriz, la aerolínea Korean Air, mientras su principal acreedor, el Banco de Desarrollo de Corea, le amplió el crédito.
Esto sirvió para solucionar algunos de los problemas más inminentes, como el bloqueo de acceso a los puertos por falta de liquidez, y a día de hoy apenas una decena de los 141 buques de contenedores y cargueros de Hanjin continúan operando, pero de forma irregular.
La naviera surcoreana realiza envíos a más de 90 puertos principales y 6.000 destinos a nivel internacional, entre ellos Estados Unidos, España y once países latinoamericanos.