Por Redacción PortalPortuario/Agencia Reuters
Irán está presionando a China para recuperar 25 millones de barriles de petróleo que han estado estancados durante seis años en puertos chinos. Esto a raíz de las sanciones impuestas por el entonces presidente estadounidense Donald Trump, según dieron cuenta tres fuentes iraníes y una china familiarizadas con el asunto.
Trump regresará al poder el 20 de enero y los analistas dicen que se espera que endurezca nuevamente las penalizaciones a las exportaciones de petróleo iraní para limitar los ingresos de Teherán, como lo hizo durante su primer mandato.
China, que dice no reconocer las sanciones unilaterales, ha estado comprando alrededor del 90% de los envíos de petróleo de Teherán en los últimos años con descuentos que han ahorrado a sus refinerías miles de millones de dólares.
El petróleo estancado, cuyo valor es de 1.750 millones de dólares al precio actual, pone de relieve los desafíos que enfrenta Irán para vender el carburante incluso en China.
El Ministerio del Petróleo de Irán no respondió a una solicitud de comentarios de Reuters. Cuando se le preguntó sobre el petróleo estancado, el Ministerio de Asuntos Exteriores de China sostuvo que la cooperación de China con Irán era legítima, pero se negó a hacer más observaciones.
A pesar de algunas de las sanciones más duras de Occidente, Irán ha logrado un comercio global de su petróleo en auge, apoyándose en una flota de petroleros clandestinos que ocultan su actividad. La mayor parte del petróleo iraní vendido a China se documenta como no iraní en ruta a puertos chinos.
Sin embargo, el carburante varado fue documentado como petróleo iraní cuando la National Iranian Oil Company (NIOC) lo entregó a puertos chinos, lo que tuvo lugar en octubre de 2018 por medio de exenciones otorgadas por Trump, de acuerdo a lo sostenido por dos de las cuatro fuentes familiarizadas con los envíos.
NIOC almacenó el petróleo en los recintos portuarios de Dalian y Zhoushan, en el este de China, donde había estado alquilando tanques, en línea con lo dado a conocer por las fuentes. El arriendo de tanques le dio a NIOC flexibilidad para vender petróleo en China o enviarlo a otros compradores de la región.
A pesar de lo anterior, a principios de 2019, Trump eliminó las exenciones y el petróleo nunca encontró compradores ni pasó las aduanas chinas y permaneció atrapado en los tanques, según tres de las cuatro fuentes.
Los tanques de petróleo en Dalian están a cargo de PDA Energy, que está pidiendo a Irán que pague más de 450 millones de dólares en tarifas de almacenamiento acumuladas desde 2018, indicó una de las tres fuentes iraníes. En Zhoushan, los tanques están a cargo del operador de almacenamiento privado CGPC.
Las conversaciones entre los funcionarios iraníes y los operadores de almacenamiento chinos sobre el pago de tarifas de almacenamiento y otras condiciones para liberar el petróleo adquirieron mayor urgencia en las últimas semanas, lo que responde a la preocupación de Teherán de que Trump pueda volver a endurecer las sanciones, de acuerdo a lo señalado por una de las fuentes iraníes familiarizadas con las discusiones.
El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, visitó Pekín en diciembre y logró algunos avances en la cuestión del petróleo estancado, según acotó la fuente iraní, pero no dio más detalles.
Irán tendrá que traspasar el petróleo desde los tanques a buques, luego hacer una transferencia de barco a barco (STS) en el mar y, posteriormente, volver a documentarlo para poder venderlo, dijo una de las fuentes iraníes, citando su experiencia con las exportaciones de petróleo iraní y los procedimientos aduaneros chinos.