La Empresa Portuaria Nacional Santo Tomás de Castilla (Empornac), en Guatemala, y la Operadora Portuaria Centroamericana (OPC), en Honduras, han dado a conocer, en las últimas semanas, que trabajan en modernizar su infraestructura y equipos para mejorar su servicio portuario, algo que sería un incentivo para clientes en El Salvador.
Los puertos se consideran como la “salida natural” para la carga de exportación salvadoreña que sale por el Atlántico. “Si se ve hacia tras en el tiempo, Puerto Cortés perdió mucha carga regional, por ejemplo de El Salvador, por las ineficiencias que había tenido y los extra costos”, explicó, al medio local El Periódico de Guatemala, Mariano Turnes, director general de OPC.
“Se verá un cambio importante” indicó Turnes sobre El Salvador al explicar que lo que se busca es recuperar la carga que se ha perdido en ese mercado, que significó el tres por ciento de la carga en contenedores que movilizó Puerto Cortes en 2017, lo que se tradujo en la transferencia de 655 mil TEUs.
Bayron Monterrosa Salazar, presidente de la Junta Directiva de Empornac, señaló que por “razones obvias geográficas”, son el puerto natural para El Salvador.
“Estamos a cien kilómetros más cerca de El Salvador, que Puerto Cortes”, señaló Monterrosa, quien reconoció que la empresa ubicada en Puerto Barrios, Izabal, ha perdido presencia en el mercado salvadoreño por falta de equipo y certeza de transparencia.
Las deficiencias operativas llevaron a que unos 200 contenedores con carga salvadoreña que pasaban por Empornac al mes dejaran de hacerlo.
“Hoy eso ya lo hemos recuperado a niveles de US$690 mil en valores de carga al mes”, aseguró Monterrosa.
“Estamos haciendo lo propio. Puerto Cortés es nuestro competidor y también le interesa El Salvador”, añadió.