Por Redacción PortalPortuario
El Puerto de Arica volvió a atender al Queen Victoria después de que transcurrieran 7 años de la última vez que operó en el recinto portuario del norte de Chile. Con esto se transformó en el octavo buque de pasajeros en arribar durante la temporada de cruceros 2024-2025.
La nave, ligada a Cunard Line, arribó procedente de Coquimbo y en el marco de su travesía de 85 días que comenzó en Hamburgo, Alemania. Esta es la última escala en territorio chileno en la ruta que circunnavega Sudamérica en sentido este a oeste.
El Queen Victoria llegó a Arica con más de 2.900 personas, entre cruceristas y tripulantes, quienes pudieron desarrollar una serie de tours en la región. Además, se instauró como las más grande de la temporada.
Dada la cantidad de turistas, se requirieron para el traslado en los distintos tours un total de 23 buses, los que efectuaron recorridos el sector costero, Codpa y Museos de la Cultura Chinchorro, entre otros atractivos regionales.
Al respecto, el gerente general de Empresa Portuaria Arica, Jorge Cáceres, destacó la importancia que tiene para el sector ir recuperando las naves, lo que a su juicio significa un impulso económico, pero que además brinda la oportunidad de promover la cultura y tradiciones locales a través de ferias artesanales y presentaciones musicales programadas.
“Estamos muy contentos porque el Centro Turístico Integral (CTI) ha tenido un flujo constante, los turistas han aprovechado el internet gratuito, los emprendedores que se instalan en el sector y, sobre todo, han recorrido la ciudad conociendo el entorno al puerto”, puntualizó Cáceres.
Durante la recalada, el gerente de EPA, junto a una delegación de la empresa y el concesionario Terminal Puerto Arica (TPA), realizaron el tradicional intercambio de placas con el capitán, aprovechando de comentarle los principales atractivos regionales.
Una vez culmine su estadía en Arica, el Queen Victoria continuará su viaje rumbo al Puerto del Callao en Perú.
Queen Victoria
El Queen Victoria fue botado al mar en 2007 desde las instalaciones del astillero de Fincantieri ubicadas en Marghera, Italia. La obra implicó el desembolso de USD 400 millones y en 2023 atravesó un proceso de renovación.
La nave se encuentra registrada bajo el pabellón de Bermuda, territorio del Reino Unido en el extranjero. Cuenta con 293 metros de eslora, 32 metros de manga y un peso bruto de 90.049 toneladas, lo que le permite estar habilitada para alojar entre 2.074 a 2.489 pasajeros y 900 tripulantes en 1.037 cabinas distribuidas en 7 cubiertas.