Por Andrés Orrego Siebert

@PortalPortuario

La presión que generan las grandes naves portacontenedores no solo “estresa” a los puertos en términos de infraestructura y de equipamiento, los cuales han debido adaptarse a las nuevas exigencias. El lado humano de la operación, desde esa perspectiva, también tuvo que acomodarse a estos desafíos.

Así lo considera Ricardo Rodríguez,  presidente del Sindicato de Estibadores de Muellaje del Maipo y vocero de la Unión Portuaria del Centro, quien en conversación con PortalPortuario.cl, abordó lo que ha sido 2017.

¿Qué destacaría de 2017?

En 2017, los trabajadores ganamos en temas de seguridad, este año marcamos un hito: Durante seis meses, de los 11 ya transcurridos, no se han registrado accidentes y eso es algo que nos tiene muy contentos. Para lograr esta cifra, hubo un trabajo de los sindicatos con sus trabajadores para concientizar a sus bases de que hay que cuidarse entre todos. Esto fue reforzado por la gestión de STI y Muellajes del Maipo, con campañas de auto cuidado y prevención.

Desde el punto de vista operativo ¿Qué hecho resaltaría?

Este año, el terminal ha tenido rendimientos que lo posicionan como el líder absoluto en transferencia de carga y logística en Chile. En los portacontenedores del tipo Neo Panamax, nuestros viejos hacen 1.000 movimientos por turno.

¿A qué se debe ese rendimiento?

Esto es fruto de la experiencia y motivación que tiene el trabajador sanantonino, al que le gusta mucho su puerto. Hace poco, STI recibió el Express Rome, portacontenedores que posee un contrato con Valparaíso, y que fue redireccionado a nuestro terminal donde descargó y embarcó 2.500 contenedores en 2,5 turnos, considerando las horas de recambio y colación. Aprovecho la ocasión de reconocer públicamente a mis compañeros de trabajo por el esfuerzo que implica trabajar arduamente para ser el puerto número uno de Chile.

En lo sindical no hubo conflictos y se mantuvo lo que en otros puertos llaman “paz social” ¿Ha cambiado la forma de pensar del portuario de San Antonio?

En materia sindical, creo que el 2017 fue un año de grandes desafíos y logros, el ingreso de un nuevo puerto (Puerto Central) al circuito de los grandes portacontenedores, implicó replantear las estrategias para poder conseguir beneficios y garantías para nuestros compañeros.

¿Cómo cuáles?

Destaco el seminario que la Unión Portuaria del Centro, organización que reúne a 600 trabajadores portuarios en San Antonio y otros 250 en Puerto Ventanas, realizó en Las Cruces. En dicha ocasión, representantes de las empresas que operan ambos terminales, la EPSA importantes exportadores – como ASOEX y CMPC -, y los trabajadores portuarios, expusieron sobre diversos temas de interés común, buscando formas de operar que beneficien a todos por igual. A esta inédita cita, acudieron también los representantes de: Empresa Portuaria Iquique, Iquique Terminal Internacional, Antofagasta Terminal Internacional, Huasco, Chañaral, Puerto Central, Lirquén, Coronel, San Vicente Terminal Internacional, entre otros.

¿Y la relación con el Gobierno?

Como organización, el 2017 fue el año de mucho trabajo con los compañeros de la Unión Portuaria de Chile, fruto de esta labor, hemos avanzado en materias, tales como; reglamentación de trabajo portuario (actualmente en revisión por el Estado), el estudio previsional – desarrollado por la Fundación Sol – que financiamos para obtener mejores beneficios a los trabajadores que se jubilan, la anhelada nueva Ley de Trabajo Portuario, por sólo nombrar algunas.

Le mencionaba el concepto “Paz Social”, porque también en entrevista con PortalPortuario.cl, el presidente de la Cotraporchi, Sergio Baeza, señaló que el modelo de esa organización estaba siendo replicado por ustedes ¿Lo comparte? 

Respecto al “modelo sindical” que el señor Baeza dice representar, y que San Antonio le estaría copiando, nuestra posición es muy clara: para nosotros (dirigentes sindicales de San Antonio), lo primero son los trabajadores y no la empresa. El modelo que él representa sólo ha crecido a costa de las luchas que San Antonio y todos los puertos de la Unión Portuaria de Chile, con sus casi cien sindicatos, han dado y seguirán dando. Es muy fácil hablar de continuidad operacional cuando se piden los mismos beneficios que los que están paralizados y, mientras dura el paro, aprovechar de embarcar el máximo de carga de los compañeros que, producto de esa lucha, están sin comer.

Entonces ¿en qué se diferencia lo que han hecho ustedes este año con lo que practica la Cotraporchi?

Nuestro modelo como trabajadores portuarios, es velar por el crecimiento armónico de los trabajadores y su empresa. No recordamos haber visto al señor Baeza alguna vez con ropa de portuario, en el muelle con sus viejos, reclamando por algún despido injustificado o accidente grave en faena. Nos encantaría que los viejos de Valparaíso tuviesen un dirigente de orilla, que vea las problemáticas, anhelos y sueños que los portuarios de todo Chile tienen.

¿En qué centrarán la mirada para 2018?

Para este 2018, nos interesa poder mantener la unidad sindical como sector portuario y lograr que la empresa se ponga en el lugar de los trabajadores, pero de verdad, y avancemos así más rápido en temas de bienestar social. Nosotros hemos hecho nuestro trabajo y bien: el terminal opera sin accidentes y a un ritmo que ningún otro terminal en Chile sería capaz de seguir. Desde el punto de vista comercial, me encantaría que San Antonio Terminal Internacional traiga de regreso a alguna línea de las que se fueron a comienzos de año a TPS o TCVAL. También nos interesa mucho mantener la agenda de trabajo que los portuarios de San Antonio y la EPSA han tenido en materias de seguridad y logística. Además esperamos para este 2018, que ya terminado el proceso de elecciones, debemos seguir trabajando con el Estado, en las materias propias de los portuarios, tal y como se ha hecho hasta el momento.

La Unión Portuaria del Centro ha ido tomando fuerza o mayor presencia el último tiempo ¿Cuál cree que ha sido su aporte?

El rol de los dirigentes sindicales de San Antonio, es representar a nuestras bases y trabajar para que todos ellos puedan estar cada vez mejor. A lo largo de los años, creemos haber contribuido a que las demandas de los trabajadores portuarios de Chile sean consideradas por el Estado, la empresa o el resto de las autoridades. También, vemos a un trabajador portuario mucho más orgulloso de su rol en la economía del país, preocupado por su seguridad en la faena y por pasar sus últimos años en casa y gozando de buena salud. Esto es lo único que nos mueve.