El tráfico de contenedores por modo ferroviario en el Puerto de Barcelona acumulado hasta el mes de noviembre de 2015 ha sido de 197.366 TEU (un TEU equivale a un contenedor de 20 pies), cifra que supone un crecimiento del 12% con respecto a 2014. De esta cifra, 105.053 TEUs (+19%) han llegado al recinto portuario en tren para ser embarcados hacia otros destinos , mientras que el resto, 92.313 TEU (+6%), han llegado por vía marítima para ser cargados en ferrocarril en dirección al hinterland.
Estos datos sitúan la cuota ferroviaria de contenedores del Puerto de Barcelona en el 14% de todo el comercio exterior contenerizado, lo cual significa que del total de contenedores de importación y exportación que pasan por el complejo, un 14% llegan o salen en tren.
Esta cuota se ha casi sextuplicado en los últimos 9 años, ya que en 2006 se situaba en el 2,5%. Por lo tanto, cada vez está más cerca el objetivo que el Puerto de Barcelona se ha fijado de alcanzar una cuota ferroviaria del 20%.
Por otra parte, en el periodo enero-noviembre el tráfico ferroviario de vehículos también ha obtenido muy buenos resultados con un total de 240.414 unidades transportadas, lo cual supone un aumento del 27% con respecto al mismo periodo de 2014, cuando se registraron 189.118 unidades. De hecho, el volumen de vehículos transportados por este modo a octubre de 2015, que se situó en 214.668 vehículos, ya superó el total anual de 2014, que fue de 199.409 unidades.
El buen funcionamiento del tráfico de vehículos por tren se ve reflejado en su cuota ferroviaria que alcanza el 39% el último mes de noviembre. Es decir, del total de vehículos que han entrado o salido del Port de Barcelona durante el citado mes, un 39% lo ha hecho por el modo ferroviario, cifra tres puntos superior al mismo mes del año anterior, que fue del 36%. Se espera que la cuota ferroviaria de vehículos acumulada al cierre de 2015 sea del 35%, lo que supondría un incremento de 4 puntos con respecto al año pasado (31%).
Aunque el volumen principal de tráfico de vehículos por tren es de descarga, con 219.704 unidades (+20%) destinadas a la exportación por vía marítima, hay que destacar el espectacular crecimiento de los vehículos de carga destinados al hinterland, que con 20.710 unidades transportadas suponen un aumento del 285% con respecto a 2014.
Buena parte de estos vehículos (16.519 unidades) se han cargado con destino a Europa a través de las vías de ancho UIC, gracias a la instalación el año 2011 del tercer carril a la línea convencional, que situó Barcelona como primer puerto del Estado conectado con Europa en ancho de vía internacional.
Al incremento del tráfico ferroviario de vehículos del puerto también ha contribuido la mejora y ampliación de las infraestructuras destinadas a estas operativas como es el caso del muelle Costa. Las obras realizadas en 2014 han resultado en una racionalización del espacio que han hecho más eficientes las operaciones en la terminal ferroviaria de este muelle donde, actualmente, opera el 16% del tráfico de vehículos en tren del Port de Barcelona. En esta instalación se descargan básicamente coches que se embarcan hacia destinos de short sea shipping y de cabotaje con las Baleares y el de Canarias.
Apuesta por la intermodalidad
El Puerto de Barcelona ha apostado los últimos años por la intermodalidad con el ferrocarril, tanto para captar un mayor volumen de carga, como para incrementar la competitividad del comercio interior y exterior y para responder a las exigencias de sostenibilidad de empresas y administraciones. Así, el esfuerzo inversor en materia de infraestructuras ferroviarias por parte del propio puerto y la creciente oferta de servicios de los operadores privados han favorecido el incremento de este tipo de tráfico.
Por otra parte, el puerto continúa pendiente de la ejecución del acuerdo para construir el nuevo acceso ferroviario para mercancías que dará servicio a la ampliación sur de la instalación catalana.
La actuación, con una inversión prevista de 110 millones de euros al 50% por parte del Puerto de Barcelona y el Ministerio de Fomento –a través de ADIF–, permitirá acceso independiente y con capacidad suficiente a la zona sur del enclave y promoverá el tráfico ferroviario de mercancías y la movilidad, tanto con respecto a sus conexiones con el exterior como a su red interna.