Por Nicolás Birchmeier

@PortalPortuario

A mano alzada fue rechazado el pre acuerdo que los dirigentes de los trabajadores portuarios eventuales de Valparaíso alcanzaron con las empresas TPS y Ultraport con intermediación del Gobierno.

A raíz de lo anterior, el paro iniciado por los estibadores el pasado 16 de diciembre y que, en las últimas semanas, pese a las instancias de diálogo ha tenido una intensificación de las protestas callejeras con incidentes y enfrentamientos con Carabineros, continúa.

El pre acuerdo incluía una propuesta de Ultraport consistente en un préstamo de $550.000, una giftcard de $250.000, un aguinaldo de $75.000 y una canasta familiar.

El documento contemplaba  la realización de un curso de capacitación en seguridad portuaria, condicionado a la asistencia de los trabajadores, implicando un monto de manutención por el monto de $350.000 y un bono de 100 mil pesos al cierre.

De igual modo se planteó la instauración de una mesa de trabajo para analizar las modalidades de contratación de los trabajadores y otros temas relacionados con la modernización del sistema portuario.

A su vez, el escrito detallaba el compromiso de TPS y Ultraport de que no habrán represalias en contra de los trabajadores que han participado en la movilización, sin perjucio de las acciones legales que pudiesen corresponder por actos delictivos acreditados.

Previo a la votación, realizada en el Sindicato de Estibadores de Valparaíso, los trabajadores habían manifestado su intención de rechazar por considerar que lo ofrecido por la empresas con el complemento del Gobierno era “más de lo mismo”.

“Se rechaza por mayoría absoluta la propuesta del Gobierno, así que por lo tanto seguimos paralizados en los dos terminales de Valparaíso y ahora estamos moviéndonos para generar un paro nacional desde el segundo turno”, dijo Pablo Klimpel, vocero de los trabajadores portuarios movilizados.

“Desde el segundo turno se ha anunciado un paro nacional, eso ya iría a un ente superior del Gobierno para que tome cartas en el asunto. Creo que con la empresa ya se terminó todo vínculo y ahora el Gobierno no tiene que ser intermediario de la empresa e involucrarse directamente, ustedes son testigos de cómo está la gente, la gente tiene todo el ánimo, todas las ganas, creían que estábamos muertos, pero estamos más vivos que nunca”, complementó el presidente de Sudemp, Osvaldo Quevedo.