El presidente del Puerto de Barcelona, Sixte Cambra, y el consejero delegado de Enagás, Marcelino Oreja, han firmaron un convenio para la promoción de nuevos servicios logísticos de gas natural licuado (GNL) en la planta de regasificación que la compañía energética gestiona en el recinto portuario. El acuerdo consiste en la elaboración conjunta de iniciativas para convertir el Puerto de Barcelona en un hub de distribución de GNL en el Mediterráneo.
Tanto el Puerto de Barcelona como Enagás están apostando de manera decidida por el gas natural, que a nivel internacional está siendo reconocido y potenciado como combustible para el transporte de mercancías porque representa una alternativa real y sostenible a los carburantes convencionales derivados del crudo.
En concreto, el gas natural en forma licuada empieza a ser utilizado en el transporte marítimo (buques) y terrestre (camiones). Se estima que a finales de 2016 un centenar de barcos serán propulsados por gas natural.
El principal beneficio que tendrá la implantación de este cambio de combustible en el Puerto de Barcelona será la reducción de gases contaminantes y de partículas en suspensión, que se traducirá en la mejora de la calidad del aire del entorno y de la ciudad. El presidente Sixte Cambra ha destacado la contribución que el uso del GNL como combustible tendrá en la disminución de la contaminación ambiental
“Respecto a los carburantes derivados del petróleo, el GNL supone una reducción del 80% en la emisión de NOx y del 100% en la emisión de partículas en suspensión y de óxidos de azufre”, puntualizó.
Por su parte, el Consejero Delegado de Enagás, Marcelino Oreja, ha destacado la experiencia de la compañía de más de 45 años en el sector del gas natural y el importante papel que la planta de regasificación de Barcelona puede desempeñar como centro logístico, en un contexto de creciente demanda.
Además de las ventajas medioambientales, ha señalado que “el uso del gas natural puede contribuir a mejorar la competitividad de la actividad del transporte, ya que se trata de un combustible más barato que los derivados del petróleo”, dijo.
La existencia de infraestructuras de suministro de GNL en el propio puerto es una condición imprescindible para potenciar el uso de este producto como combustible alternativo de transporte.
La planta de almacenamiento y regasificación de Enagás en el Port de Barcelona, operativa desde 1969, acumula una importante experiencia y conocimiento en el tratamiento del GNL. La disponibilidad de esta planta representa una gran oportunidad para desarrollar el proceso de cambio de combustible en el complejo portuario catalán.
El convenio permitirá desarrollar con más rapidez la cadena de suministro necesaria para convertir Barcelona en un hub de distribución de GNL en el Mediterráneo. Así, la introducción de este carburante alternativo permitirá mejorar la calidad del aire del entorno, incrementar la competitividad de las empresas de logística y transporte (ya que su precio es inferior al del gasoil) y también contribuirá a atraer nuevas líneas marítimas de buques modernos propulsados por GNL.
La colaboración entre el Port de Barcelona y Enagás para el impulso del GNL como combustible alternativo de movilidad se extiende a otros ámbitos, como el proyecto europeo Core LNGas Hive, liderado por Enagás en colaboración con más de 40 entidades y empresas, en el cual el Puerto de Barcelona participa como socio y coordinador de cinco iniciativas.
Estas acciones consisten en la adaptación de un atraque del muelle de la Energía para el suministro de GNL a gabarra y buques de pequeñas dimensiones; la modificación de una gabarra para suministrar GNL a buques; el diseño y montaje de un motor de gas natural alimentado por GNL para generar electricidad y suministrarla a
un buque de carga durante su estancia en el puerto; la transformación de dos straddle-carriers (maquinaria de terminal) en las dos terminales de contenedores del Port de Barcelona (TCB y BEST) para ser propulsadas por GNL; y el diseño de un remolcador propulsado por gas natural.