Por Nicolás Birchmeier Rivera
@PortalPortuario
Pablo Zegers, experto en Inteligencia Artificial e ingeniero civil industrial de la Pontificia Universidad Católica (PUC), aseguró que la inteligencia artificial mejorará la eficiencia portuaria.
Las nuevas tecnologías, aunque no ajenas de riesgos, ya comienzan a ser incorporadas en los terminales portuarios como Maasvlakte II; en Rotterdam, que -de la mano de APM Terminals- ya es completamente automatizado. Esa misma firma posee en México el Terminal de Contenedores II de Lázaro Cárdenas con maquinarias semiautomáticas, las mismas que aspira tener el Puerto de Gran Escala de San Antonio.
Al respecto, Zegers -en diálogo con PortalPortuario.cl durante el último Coloquio de la Liga Marítima de Chile– señaló que en los próximos años las empresas sumarán una mayor cantidad de máquinas que necesiten menos personal para funcionar.
El experto reflexionó que esta tecnología sería de gran ayuda al sector. “De partida, haría más eficiente todos los procesos operativos, que es lo se está haciendo en todas las empresas del mundo: revisar todo lo que se hace, incorporar más máquinas y comenzar a funcionar”.
Respecto a los beneficios que traería consigo la adopción de la Inteligencia Artificial, el profesional comentó que principalmente sería la “disminución de costos, elevar los estándares de calidad en los procesos portuarios, mantenerlos uniformes, y permitir hacer otras operaciones, al tener recursos liberados de la reducción de gastos”.
En cuanto a sus posibles riesgos puntualizó que uno de ellos podría ser sufrir ciberataques en sus operaciones, ya que “al ser digital, puede ser vulnerado en algún momento”. Cabe recordar que hace pocos días, Maersk informó que, a causa del ataque informático del virus Petya sufrido a finales de junio, tendrían cerca de USD 300 millones en pérdidas.
Por último, mencionó que, a pesar de que en Chile posee escasas investigaciones relacionadas con la Inteligencia Artificial, debido a la contracción de la economía y el incremento del costo de la mano de obra, es solo cuestión de tiempo para que las empresas “sean impulsadas hacia una brusca incorporación de estas tecnologías en el mercado chileno“.
