Los almacenes de combustible, de propiedad del Grupo Ultracargo, en el Puerto de Santos llevan siete días ardiendo y, según el último reporte de los bomberos santistas, el fuego -iniciado el pasado jueves- se reactivó este miércoles en uno de los estanques.
De acuerdo a lo difundido por el diario A Tribuna de Santos, los bomberos locales se encuentran planificando una operación de alta complejidad para contener dos puntos de escurrimiento de material inflamable que ha salido de uno de los toneles que evidenció fisuras. En la acción se usarán espumas y líquidos retardantes para enfríar el sector para proceder -posteriormente- a cerrar las válvulas del estanque.
Una vez detenido el vertimiento se podrá, según el Cuerpo de Bomberos, atacar directamente las llamas. Por ahora, solo se ha empleado la estrategia de mantener humedecida y fría la zona aledaña a donde se produce el fuego para evitar su propagación.
Esa estrategia se ha traducido en el uso de 83 mil litros de agua de mar a través de cinco naves que están bombeando el liquido a una distancia de 650 metros. Por ahora no se ha usado el producto “cold fire” importado por Ultracargo desde Estados Unidos.
“El cold fire es eficiente en el combate directo al fuego y estamos analizando el mejor momento para usarlo cuando no haya más escurrimientos”, explicó el coronel Marco Aurélio Alves Pinto, comandante del Cuerpo de Bombeiros del Estado.