Por Redacción PortalPortuario.cl
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Un grupo de trabajo de la Organización Marítima Internacional (OMI) logró avances concretos en el desarrollo de pautas de intensidad de carbono, que se utilizarán al evaluar el impacto climático general de los nuevos combustibles, a los que el transporte marítimo debe hacer la transición para cumplir con los requisitos impuestos por la OMI.
El grupo de trabajo, que se reunió del 15 al 17 de septiembre para realizar sesiones sobre la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero de los buques, debatió una serie de presentaciones de los Estados miembros y organizaciones internacionales, incluidas las directrices propuestas para el ciclo de vida.
El ciclo de vida se refiere a la evaluación de las emisiones de GEI desde la producción de combustible hasta el uso final a bordo de un barco (Well-to-Wake), incluyendo desde la producción primaria hasta el transporte del combustible en el tanque de un barco (Well-to-Tank) y, además, a partir del tanque de combustible del barco hasta el escape (Tank-to-Propeller o Tank-to-Wake).
Según la OMI, “se necesitarán combustibles bajos en carbono y con cero emisiones para descarbonizar el transporte marítimo. Para las diferentes opciones de combustible, es necesario considerar cuestiones como la seguridad, la regulación, los precios, la disponibilidad de la infraestructura, las emisiones de GEI del ciclo de vida, las limitaciones de la cadena de suministro, las barreras para la adopción y otros factores”.
De acuerdo con la organización, “los futuros combustibles con bajas o cero emisiones de carbono para el transporte marítimo tienen diversas vías de producción, que implican diferencias significativas en su huella ambiental general. Las directrices de la OMI sobre LCA establecerán un marco común para la evaluación del ciclo de vida de la intensidad de GEI de los combustibles marinos, cubriendo tanto las partes aguas arriba como aguas abajo”.
“La determinación de los valores de intensidad de GEI del ciclo de vida para una amplia gama de combustibles requiere evaluaciones con un enfoque científico. En este sentido, el grupo acordó que era necesario desarrollar un procedimiento con criterios claros y objetivos que se utilizarán para determinar los valores de emisión por defecto, o valores reales en determinadas circunstancias, incluida la documentación, verificación y certificación”, indicó el organismo internacional.
El grupo de trabajo identificó áreas prioritarias para seguir avanzando en el desarrollo de las directrices, incluida la identificación de criterios de sostenibilidad, de esquemas de certificación de combustible apropiados y de enfoques para la revisión periódica, por parte de la OMI, de los valores de emisión tanto aguas arriba como aguas abajo.